Causas
Para comprender cómo ocurre la pérdida auditiva, puede ser útil entender cómo funciona la audición.
El oído se compone de tres partes principales: el oído externo, el medio y el interno. Las ondas sonoras pasan a través del oído externo y hacen vibrar al tímpano. El tímpano y tres pequeños huesos del oído medio incrementan las vibraciones a medida que viajan hacia el oído interno. Allí las vibraciones pasan a través del líquido en una parte del oído interno con forma de caracol, conocida como cóclea.
En las células nerviosas de la cóclea hay miles de vellos pequeños que ayudan a convertir las vibraciones sonoras en señales eléctricas. Las señales eléctricas se trasmiten al cerebro. El cerebro convierte estas señales en sonido.
¿Cómo puede producirse la pérdida de la audición?
Algunas causas de la pérdida auditiva son las siguientes:
- Daño al oído interno. El envejecimiento y los ruidos fuertes pueden causar el desgaste natural de los vellos o de las neuronas de la cóclea que envían señales de sonido al cerebro. Los vellos y neuronas dañados o ausentes no envían señales eléctricas útiles. Esto causa pérdida auditiva.
- Acumulación de cerumen. Con el paso del tiempo, el cerumen puede bloquear el conducto auditivo y evitar la conducción de las ondas sonoras. La eliminación del cerumen puede ayudar a restaurar la audición.
- Infección del oído o tumores o bultos anormales en los huesos. En el oído externo o medio, cualquiera de estos factores puede causar pérdida de la audición.
- Ruptura del tímpano, también llamada perforación de la membrana timpánica. Los ruidos muy fuertes, los cambios repentinos en la presión, introducir un objeto con punta en el oído y las infecciones pueden causar la ruptura del tímpano.