Factores de riesgo
La obesidad suele ser el resultado de una combinación de causas y factores contribuyentes:
- Herencia e influencias familiares. Los genes que heredas de tu padre y madre pueden afectar la cantidad de grasa corporal que almacenas y dónde se distribuye esa grasa.
- Dieta poco saludable. Una dieta que contiene muchas calorías, mucha comida rápida, bebidas altamente calóricas y porciones demasiado grandes, pero pocas frutas y vegetales contribuye al aumento de peso.
- Calorías líquidas. Las personas beben muchas calorías sin sentir saciedad, especialmente las calorías provenientes del alcohol. Otras bebidas altas en calorías, como los refrescos azucarados, pueden contribuir a un aumento de peso.
- Inactividad. Si tienes un estilo sedentario de vida, fácilmente puedes ingerir al día más calorías de las que quemas a través del ejercicio y las actividades de la rutina diaria.
- Embarazo. El aumento de peso es común durante el embarazo. Para algunas mujeres, después del nacimiento del bebé, es difícil perder ese peso que aumentaron.
- Dejar de fumar. Con frecuencia, dejar de fumar está asociado con el aumento de peso. Para algunas personas, puede llevar a un aumento de peso suficiente para calificar como obesidad.
- Falta de sueño. No dormir lo suficiente causa cambios hormonales que aumentan el apetito. Lo mismo ocurre al dormir demasiado.
- Estrés. Muchos factores externos que afectan el estado de ánimo y el bienestar pueden contribuir a la obesidad. Las personas a menudo buscan más alimentos ricos en calorías cuando se enfrentan a situaciones estresantes.