Prevención
La mayoría de las personas con intolerancia a la lactosa pueden disfrutar de algunos productos lácteos sin presentar síntomas.
Estas son algunas maneras de cambiar tu dieta para reducir los síntomas de la intolerancia a la lactosa:
- Elige porciones más pequeñas de lácteos. Bebe pequeñas porciones de leche de a sorbos, hasta 4 onzas por vez. Cuanto más pequeña sea la porción, menos probabilidades habrá de que cause problemas gastrointestinales.
- Reserva la leche para las comidas. Bebe leche junto con otros alimentos. Esto desacelera el proceso digestivo y puede reducir los síntomas de la intolerancia a la lactosa.
- Prueba consumir varios productos lácteos diferentes. No todos los productos lácteos tienen la misma cantidad de lactosa. Por ejemplo, los quesos duros, como el queso suizo o el cheddar, tienen pequeñas cantidades de lactosa y no suelen provocar síntomas.
- Compra productos con contenido reducido en lactosa o sin lactosa. Puedes encontrar estos productos en la mayoría de los supermercados en la sección de productos lácteos.