Alrededor de los 50 años de edad, cerca de la mitad de las personas sufre síntomas de hemorroides.
- Comezón, ardor y dolor alrededor del ano.
- Pequeñas cantidades de sangre roja brillante en el papel de baño o en la taza del inodoro.
Las hemorroides se forman cuando las venas de tu recto crecen. Por lo general se forman con el tiempo cuando puja para expulsar heces duras.
- Internas, dentro del canal anal. Por lo general son indoloras, pero pueden sangrar.
- Externas, cuando sobresalen hacia fuera del orificio anal; pueden causar molestias, dolor o comezón.
Además de las hemorroides, el sangrado del recto puede ocurrir por otras razones, algunas de las cuales pueden ser graves.
- Expulsar heces duras y secas puede raspar el recubrimiento anal.
- Una infección del recubrimiento del recto o pequeñas grietas o desgarres en este, llamadas fisuras anales, también pueden causar sangrado rectal.
- Las heces negras, tipo alquitrán, las heces marrón o la sangre roja brillante en sus heces pueden indicar sangrado más extenso en otra parte de su tracto digestivo.
- Pequeños sacos que sobresalen de tu intestino grueso (divertículos), las úlceras, los pequeños crecimientos (pólipos), el cáncer y algunos trastornos crónicos intestinales pueden ocasionar sangrado.
Aunque incómodas, las hemorroides no son un padecimiento médico grave. La mayoría de ellas responde bien a las siguientes medidas de autocuidado:
- Bebe muchos líquidos y consume alimentos ricos en fibra.
- Báñate o dúchate diariamente para limpiar con cuidado la piel alrededor de tu ano con agua caliente. El jabón no es necesario y puede agravar el problema.
- Mantente activo. Ejercítate.
- Procura no pujar durante los movimientos intestinales ni permanecer sentado demasiado tiempo en la taza del baño.
- Toma baños calientes.
- Aplica compresas de hielo.
- Para ataques de dolor o irritación, aplica cremas de venta libre, ungüentos o fomentos con hamamelis o un agente anestésico tópico.
- Prueba con complementos de fibra para mantener las heces suaves y regulares.
- Las hemorroides se vuelven más dolorosas cuando se forma un coágulo en la vena crecida.
- Si tus hemorroides son muy dolorosas, tu médico puede prescribir una crema o un supositorio que contenga hidrocortisona para reducir la inflamación.
- Algunas hemorroides internas pueden requerir cirugía u otros procedimientos para encogerlas o eliminarlas.
Diagnosticar la causa del sangrado rectal puede ser difícil
Consulta a tu médico para una evaluación. Busca atención de emergencia si notas grandes cantidades de sangrado rectal, aturdimiento, debilidad o frecuencia cardiaca rápida (más de 100 latidos por minuto).