Complicaciones

Complicaciones

 

El TDAH puede dificultar la vida de los niños. Los niños con TDAH:

  • Con frecuencia pelean en el salón de clase, lo que puede conducir al fracaso académico y al juicio de otros niños y adultos.
  • Tienden a tener más accidentes y lesiones de todos tipos, que los niños sin el trastorno.
  • Tienen una pobre autoestima.
  • Tienen más probabilidades de tener problemas al interaccionar con compañeros y adultos y para ser aceptados por ellos.
  • Tienen un riesgo creciente de abuso de drogas y alcohol y otro comportamiento delictivo.

Tratamientos y medicamentos

Tratamientos y medicamentos

 

Los tratamientos estándar para TDAH en los niños incluyen medicación, educación, capacitación y terapia. Estos tratamientos pueden aliviar muchos de los síntomas del TDAH, pero no lo curan. Puede tomar algún tiempo para determinar qué es lo que funciona mejor para tu hijo.

 

Medicamentos estimulantes

 

Los fármacos estimulantes son los medicamentos más comúnmente recetados para TDAH; parecen fomentar y equilibrar los niveles de los químicos del cerebro llamados neurotransmisores. Estos medicamentos ayudan a mejorar las señales y los síntomas de la falta de atención y la hiperactividad, algunas veces dramáticamente.

Los fármacos estimulantes están disponibles en forma de acción corta y prolongada. La dosis correcta varía de niño a niño, de manera que toma cierto tiempo encontrarla y podría necesitar ser ajustada si ocurrieran efectos secundarios significativos o conforme madura su hijo. Pregunta al médico acerca de los posibles efectos secundarios de los estimulantes.

 

Otros medicamentos

 

Otros medicamentos utilizados para tratar el TDAH incluyen antidepresivos, pero funcionan más lentamente que los estimulantes y puede tomar varias semanas antes de que tengan todo su efecto. Estas pueden ser buenas opciones si tu niño no puede tomar estimulantes, debido a problemas de salud o si le causan efectos secundarios graves.

Pregunta a tu médico sobre los posibles efectos secundarios de cualquier medicamento.

 

Medicina alternativa

 

Hay muy poca investigación que indique qué tratamientos de medicina alternativa pueden reducir los síntomas de TDAH. Antes de considerar cualquier intervención alternativa, habla con tu médico para determinar si la terapia es segura. Algunos tratamientos de medicina alternativa intentados, pero que no se han demostrado científicamente, incluyen:

 

 

  • Yoga o meditación.
  • Las rutinas regulares de yoga o meditación y técnicas de relajación pueden ayudar a los niños a relajarse y aprender disciplina, lo que puede ayudarles a manejar sus síntomas.

  • Dietas especiales.
  • La mayoría de las dietas involucran la eliminación de alimentos que se cree pueden incrementar la hiperactividad, como el azúcar y alérgenos como el trigo, leche y huevos. Algunas dietas recomiendan eliminar los colorantes y aditivos artificiales de alimentos. Hasta el momento, los estudios no han encontrado un vínculo consistente entre la dieta y la mejoría en los síntomas de TDAH, aunque existe cierta evidencia que sugiere que algunos cambios en la dieta podrían hacer una diferencia. Sin embargo, limitar el azúcar no parece ayudar. La cafeína utilizada como estimulante para los niños con TDAH puede tener riesgos y no se recomienda.

  • Vitaminas o suplementos minerales.
  • Mientras que ciertas vitaminas y minerales son necesarios para una buena salud, no existe evidencia de que las vitaminas o minerales complementarios puedan reducir los síntomas de TDAH.

  • Suplementos de hierbas.
  • No existe evidencia que sugiera que los remedios a base de hierbas ayudan al TDAH y algunos pueden ser dañinos.

  • Fórmulas patentadas.
  • Estos son productos hechos de vitaminas, micronutrientes y otros ingredientes, que se venden como un posible tratamiento de suplementos para niños con TDAH, pero han tenido poca o nula investigación y están exentos de la supervisión de las autoridades sanitarias.

  • Ácidos grasos esenciales.
  • Estas grasas, que incluyen los aceites omega-3, son necesarias para que el cerebro funciones adecuadamente. Los investigadores aún están estudiando si pueden mejorar los síntomas de TDAH.

  • Capacitación de retroalimentación neuronal.
  • También llamada biorretroalimentación de ondas cerebrales, este tratamiento involucra sesiones regulares en las cuales un niño se enfoca en ciertas tareas mientras utiliza una máquina que muestra los patrones de ondas cerebrales. En teoría, un niño puede aprender a mantener activos los patrones de ondas cerebrales frente al cerebro, mejorando los síntomas de TDAH.

  • Otras técnicas.
  • Pueden incluir terapia de integración sensorial y capacitación de metrónomo interactivo.

     

     

Preguntas y respuestas

Preguntas y respuestas

 

¿Tu hijo tiene graves problemas de conducta?

¿Sus comportamientos problema ocurren todo el tiempo?

¿Los horarios y patrones de sueño de tu hijo están afectados por estos comportamientos?

¿Tu hijo lleva mucho tiempo con mal desempeño académico?

¿Tu hijo tiene problemas para leer?

¿Tu hijo consume drogas o alcohol, o tiene un comportamiento delictivo?



Mantente al tanto de la conducta de tu hijo.

Es necesario que acude al médico o que pida ayudas a un familiar o persona de confianza.

¿Cuándo ver al médico?

¿Cuándo ver al médico?

 

Si te preocupa que tu hijo pudiera estar mostrando señales de TDAH, consulta a tu pediatra o médico familiar, quien puede referirte a un especialista, pero es importante tener una evaluación médica primero para examinar otras posibles causas para las dificultades de tu hijo.

Si tu hijo ya está siendo tratado por TDAH, deberás visitar regularmente al médico hasta que los síntomas hayan mejorado y, luego, cada tres o cuatro meses si se estabilizan los síntomas.

Llama al médico si tu hijo tiene cualquier efecto secundario por los medicamentos, como pérdida de apetito, problemas para dormir, creciente irritabilidad o si el TDAH de tu hijo no muestra una gran mejoría con el tratamiento inicial.

Comportamiento normal contra TDAH

Comportamiento normal contra TDAH

 

La mayoría de los niños sanos no ponen atención, son hiperactivos o impulsivos. Es normal para los niños en preescolar tener periodos de atención cortos y no poder mantenerse entretenidos con una actividad por mucho tiempo. Incluso para los niños mayores y adolescentes, los periodos de atención con frecuencia dependen del nivel de interés.

Lo mismo es aplicable para la hiperactividad. Los niños más pequeños están llenos de energía: con frecuencia cansan a sus padres mucho antes de que ellos se cansen. Además, algunos niños simplemente de manera natural tienen un nivel de actividad más alto que otros y nunca deben ser clasificados con TDAH sólo porque son diferentes de sus amigos o hermanos.

Los niños que tienen problemas en la escuela, pero que se llevan bien en casa o con amigos, probablemente están teniendo dificultades con otra cosa. Lo mismo es válido para aquellos que son hiperactivos o que no ponen atención en casa, pero que no afecta su trabajo escolar y amistades.

 

Causas

Causas

 

Mientras que la causa exacta del TDAH no es clara, los esfuerzos de investigación continúan.

Se han involucrado múltiples factores en el desarrollo del TDAH. Puede estar presente en las familias y los estudios indican que la genética podría desempeñar un rol. Ciertos factores ambientales también pueden incrementar el riesgo, así como los problemas con el sistema nervioso central durante momentos clave del desarrollo.

 

Afecciones de coexistencia

Afecciones de coexistencia

 

El TDAH no causa otros problemas psicológicos o de desarrollo; sin embargo, los niños que lo presentan tienen una probabilidad mayor que otros niños de tener también las siguientes afecciones:

 

Afección/¿Cómo reconocerla?

 

  • Discapacidad del aprendizaje, incluyendo problemas para entender y comunicarse.
  • Trastornos de ansiedad, que pueden ocasionar preocupación y nerviosismo abrumadores y empeoramiento de los síntomas del TDAH, hasta que la ansiedad se trata y controla.
  • Depresión, que ocurre con frecuencia en los niños con TDAH.
  • Trastorno bipolar, que incluye depresión, así como conducta maníaca.
  • Trastorno de oposición desafiante, generalmente definido como un patrón de comportamiento negativo, desafiante y hostil hacia las figuras de autoridad.
  • Trastorno del comportamiento, marcado por un comportamiento antisocial, como robar, pelear, destruir propiedad y lastimar personas o animales.
  • Síndrome de Tourette, trastorno neurológico caracterizado por tics repetitivos de músculos o voz.

Síntomas

Síntomas

 

Las dos principales características de esta afección son falta de atención y comportamiento hiperactivo-impulsivo. En algunos niños, las señales del TDAH pueden observarse desde los dos o tres años de edad.

 

    Las señales y síntomas del TDAH pueden incluir:

  • Dificultad para poner atención
  • Soñar despierto con frecuencia
  • Dificultad para seguir instrucciones y aparentemente no escuchar
  • Tener problemas frecuentes para organizar tareas y actividades
  • Olvidar y perder con frecuencia artículos necesarios, como libros, lápices o juguetes
  • Fracasar con frecuencia en terminar la tarea de la escuela, los quehaceres de la casa u otras
  • Distraerse fácilmente
  • Juguetear o retorcerse frecuentemente
  • Dificultades para permanecer sentado y correcto, en movimiento constante
  • Ser excesivamente parlanchín
  • Interrupción o intervención inoportuna en las conversaciones o juegos de otros
  • Problemas para esperar su turno

 

El TDAH ocurre más frecuentemente en varones que en mujeres y los comportamientos puede ser diferentes en niños y niñas. Por ejemplo, los niños pueden ser más hiperactivos y las niñas pueden tender a no poner atención silenciosamente.

Factores de riesgo

 

Factores de riesgo

 

Los factores de riesgo para el TDAH pueden incluir:

Motivo  

Parientes consanguíneos (como padres o hermanos) con TDAH u otro trastorno de salud mental.

 

Exposición a toxinas ambientales, como plomo, encontrado principalmente en la pintura y tubería de edificios viejos.
Uso materno de drogas, alcohol o tabaquismo durante el embarazo.

Exposición maternal a venenos ambientales, como los bifenilos policlorados, durante el embarazo.

Nacimiento prematuro.

Estilo de vida y remedios caseros

Estilo de vida y remedios caseros

 

A pesar de que el trastorno de ansiedad social generalmente requiere ayuda de un experto médico o psicoterapeuta calificado, puedes intentar algunas técnicas de autoayuda para manejar situaciones que probablemente desencadenen tus síntomas:

 

  • Acercarte a personas con las que te sientas cómodo
  • Unirte a un grupo de ayuda local o en internet
  • Practicar acondicionamiento físico o estar físicamente activo de forma regular
  • Dormir lo suficiente
  • Comer sano y seguir una dieta balanceada
  • Evitar el alcohol
  • Limitar o evitar la cafeína

 

Practicar en pasos pequeños

 

Primero, considera tus miedos para identificar qué situaciones te causan más ansiedad. Entonces gradualmente practica estas actividades hasta que te causen menos ansiedad.Comienza con pasos pequeños en situaciones que no sean tan abrumadoras. Considera practicar estas situaciones:

 

  • Comer con un familiar cercano, amigo o conocido en un lugar público
  • Hacer contacto visual y regresar los saludos de otros, o ser el primero en saludar
  • Hacer un cumplido a alguien
  • Pedir a un empleado de la tienda que te ayude a encontrar un artículo
  • Preguntar direcciones a un extraño
  • Mostrar interés en otros –preguntar sobre sus hogares, hijos, nietos, pasatiempos o viajes–, por ejemplo
  • Llamar a un amigo para hacer planes

 

Prepárate para situaciones sociales

 

En principio, ser social cuando te sientes ansioso es retador. Por muy difícil o doloroso que sea al principio, no evites las situaciones que te causen los síntomas. Al enfrentar regularmente estas situaciones, continuarás construyendo y reforzando tus habilidades de adaptación.

Estas estrategias pueden ayudarte a comenzar a enfrentar situaciones que te hacen sentir nervioso:

 

  • Prepárate para una conversación, por ejemplo, al leer un periódico para identificar un tema interesante del que puedas hablar
  • Enfócate en cualidades personales que te gusten de ti mismo
  • Practica ejercicios de relajación
  • Adopta técnicas de manejo de estrés
  • Establece metas realistas

 

Pon atención en qué tan seguido las situaciones vergonzosas a las que tienes miedo en realidad suceden. Puedes notar que los escenarios que temes usualmente no tienen lugar. Cuando sucedan situaciones vergonzosas, recuerda que esos sentimientos pasarán y podrás manejarlos.

 

Medicina alternativa

Varios remedios de hierbas han sido estudiados como tratamientos para la ansiedad, pero es necesaria más investigación para entender por completo los riesgos y beneficios.

 

Kava. La kava parecía ser un tratamiento prometedor para la ansiedad, pero algunos reportes de daño hepático serio –aún con uso de corto plazo– causado en varios países europeos y Canadá lo sacaron del mercado. Evita usar kava hasta que se hagan estudios de seguridad más rigurosos, especialmente si tienes problemas de hígado o tomas medicamentos que afecten tu hígado.
Valeriana. En algunos estudios, gente que ha usado valeriana reportó menos ansiedad y estrés, pero en otros estudios no se reportaron beneficios. Platica con tu médico acerca de la valeriana antes de probarla. A pesar de que generalmente es bien tolerada, hay algunos casos que reportan personas que desarrollan problemas de hígado al tomar preparaciones que contenían valeriana. Si has consumido valeriana por mucho tiempo y quieres dejar de usarla, muchas autoridades recomiendan que se disminuya poco a poco para evitar síntomas de abstinencia.
Pasiflora. Unos cuantos ensayos clínicos sugieren que la pasiflora puede ayudar con la ansiedad. En muchos productos comerciales, la pasiflora es combinada con otras hierbas, haciendo difícil distinguir las cualidades únicas para cada hierba. La pasiflora es considerara generalmente segura cuando se toma como es indicado, pero algunos estudios han encontrado que puede causar somnolencia, mareo y confusión.
Teanina. Este aminoácido se encuentra en el té verde y algunos suplementos. Evidencia preliminar muestra que la teanina puede hacer sentir a algunas personas más calmadas, pero hay evidencia limitada sobre si ayuda a tratar la ansiedad.

 

Antes de tomar remedios de hierbas o suplementos, habla con tu médico para garantizar que son seguros para ti y no interfieren con algún medicamento que tomes.