Causas

Causas

Las causas exactas de la enfermedad de Alzheimer no se comprenden en su totalidad. Pero a un nivel básico, las proteínas del cerebro no funcionan de la forma habitual. Esto interrumpe el trabajo de las células cerebrales, llamadas neuronas, y desencadena una serie de eventos.

Los científicos creen que, en la mayoría de los casos, la enfermedad de Alzheimer es consecuencia de una combinación de factores genéticos, ambientales y del estilo de vida que afectan el cerebro a lo largo del tiempo. En menos del 1 % de los casos, la enfermedad de Alzheimer ocurre por cambios genéticos específicos que prácticamente garantizan que una persona tendrá la enfermedad. En estos casos, la enfermedad generalmente comienza en la madurez.

El desarrollo de la enfermedad comienza años antes de que aparezcan los primeros síntomas. El daño comienza más a menudo en la región del cerebro que controla la memoria. La pérdida de neuronas se extiende en un patrón algo predecible a otras regiones del cerebro. En la etapa avanzada de la enfermedad, el tejido cerebral está considerablemente reducido.
Los investigadores que tratan de entender la causa de la enfermedad de Alzheimer se centran en el papel de dos proteínas:

  • Placas. El beta amiloide es un fragmento de una proteína más grande. Cuando estos fragmentos se agrupan, parecen tener un efecto tóxico en las neuronas e interrumpen la comunicación entre las neuronas cerebrales. Estos grupos forman depósitos más grandes llamados placas amiloides, que también incluyen otros desechos celulares.
  • Ovillos. Las proteínas tau juegan un papel en el sistema interno de apoyo y trasporte de las neuronas cerebrales para trasportar nutrientes y otros materiales esenciales. En la enfermedad de Alzheimer, las proteínas tau cambian de forma y se organizan en estructuras llamadas ovillos neurofibrilares. Los ovillos interrumpen el sistema de trasporte y provocan daños en las neuronas.

Síntomas

Enfermedad de Alzheimer

La enfermedad de Alzheimer es un trastorno del cerebro que empeora con el tiempo. Se caracteriza por cambios en el cerebro que derivan en depósitos de ciertas proteínas. La enfermedad de Alzheimer hace que el cerebro se encoja y que las neuronas cerebrales, a la larga, mueran. La enfermedad de Alzheimer es la causa más común de demencia, un deterioro gradual en la memoria, el pensamiento, el comportamiento y las habilidades sociales. Estos cambios afectan la capacidad de funcionamiento de una persona.

Los signos tempranos de la enfermedad incluyen el olvido de eventos o conversaciones recientes. Con el tiempo, avanza hasta convertirse en un problema grave de la memoria y la pérdida de la capacidad para hacer las tareas cotidianas.

No hay ningún tratamiento que cure la enfermedad de Alzheimer. En las etapas avanzadas, la pérdida grave de la función cerebral puede provocar deshidratación, desnutrición o infección. Estas complicaciones pueden provocar la muerte.

Síntomas

Al principio, es posible que alguien con la enfermedad reconozca problemas para recordar las cosas y pensar con claridad. A medida que los síntomas empeoran, hay más posibilidades de que un familiar o amigo note los problemas.

Las personas con enfermedad de Alzheimer podrían pasar por las siguientes situaciones:

  • Repetir afirmaciones y preguntas una y otra vez.
  • Olvidar conversaciones, citas médicas o eventos.
  • Extraviar artículos y, a menudo, ponerlos en lugares en los que no tiene sentido hacerlo.
  • Perderse en lugares que solían conocer bien.
  • Con el tiempo, olvidar los nombres de familiares y de objetos de uso cotidiano.
  • Tener problemas para encontrar el nombre adecuado de objetos, para expresar pensamientos o para participar en conversaciones.

La enfermedad de Alzheimer dificulta concentrarse y pensar, en especial sobre conceptos abstractos, como los números.

Las actividades rutinarias que requieren completar pasos en orden se convierten en un problema. Esto puede incluir planear y elaborar una comida, o jugar un juego favorito. Con el tiempo, las personas con enfermedad de Alzheimer avanzada se olvidan de cómo hacer tareas básicas, como vestirse y bañarse.

¿Cuándo consultar al médico?

Varias afecciones pueden ocasionar la pérdida de la memoria u otros síntomas de demencia. Algunas de ellas pueden tratarse. Si estás preocupado por tu memoria u otras habilidades del pensamiento, habla con un profesional de atención médica.

Si te preocupan las habilidades del pensamiento que observas en un familiar o amigo, habla sobre tus inquietudes y pregunta si pueden asistir juntos a una cita con un profesional de atención médica.

Diagnóstico

Diagnóstico

Una parte importante del diagnóstico de la enfermedad de Alzheimer incluye poder explicar los síntomas, como la perspectiva de un familiar o amigo cercano sobre estos y su repercusión en la vida diaria. Las pruebas de memoria y de las habilidades de pensamiento también ayudan a diagnosticar la enfermedad de Alzheimer.

Los análisis de sangre y los estudios por imágenes pueden descartar otras causas potenciales para los síntomas. También pueden ser útiles para que el profesional de atención médica identifique mejor la enfermedad que causa los síntomas de demencia.

Posiblemente, el diagnóstico de la enfermedad de Alzheimer se hará con pruebas como las siguientes:

Exploración física y neurológica. El médico te hará un examen físico. Un examen neurológico puede incluir una prueba de lo siguiente:

  • Reflejos.
  • Tono muscular y fuerza.
  • Capacidad para levantarte de una silla y caminar por la habitación.
  • Sentido de la vista y la audición.
  • Coordinación.
  • Equilibrio.

Análisis de laboratorio. Los análisis de sangre pueden ayudar a descartar otras causas posibles para la pérdida de la memoria y la confusión, como son un trastorno de la tiroides o niveles demasiado bajos de vitaminas. Los análisis de sangre también pueden medir los niveles de la proteína beta amiloide y la proteína tau, pero estos análisis no están ampliamente disponibles y la cobertura puede ser limitada.

Análisis neuropsicológicos y del estado mental. El profesional de atención médica puede darte una breve prueba del estado mental para evaluar tu memoria y tus habilidades de pensamiento. Las formas más extensas de este tipo de prueba pueden ofrecer más detalles sobre la función mental que pueden compararse con otras personas de una edad y un nivel de educación similares.

Diagnóstico por imágenes del cerebro. Habitualmente se utilizan imágenes del cerebro para precisar cambios visibles relacionados con afecciones distintas de la enfermedad de Alzheimer, que pueden causar síntomas similares, como accidentes cerebrovasculares, traumatismos o tumores. Las nuevas técnicas de obtención de imágenes pueden ayudar a detectar cambios específicos en el cerebro ocasionados por la enfermedad de Alzheimer, pero se usan principalmente en centros médicos importantes o en ensayos clínicos.

Prevención

Prevención

La enfermedad de Alzheimer es una afección que no se puede prevenir. Sin embargo, se pueden modificar varios factores de riesgo en el estilo de vida.

Existe evidencia de que tomar medidas para reducir el riesgo para enfermedades cardiovasculares también puede disminuir el riesgo de demencia.

Estas son algunas opciones de un estilo de vida saludable para el corazón que se pueden seguir para reducir el riesgo de demencia:

  • Hacer ejercicio con regularidad.
  • Llevar una alimentación de frutas y verduras frescas, aceites saludables y alimentos bajos en grasas saturadas, como la dieta mediterránea.
  • Quédate en casa cuando estés enfermo y no vayas a trabajar si tienes vómitos, diarrea o fiebre. No envíes a tu hijo a la escuela si él o ella tienen estos signos, tampoco.
  • Seguir las pautas de tratamiento para controlar la hipertensión arterial, la diabetes y el colesterol alto.
  • Si fumas, pide al profesional de atención médica que te ayude a dejar el hábito.

En un estudio grande y prolongado que se hizo en Finlandia, se descubrió que los cambios en el estilo de vida ayudaban a reducir el deterioro cognitivo en personas que corrían el riesgo de tener demencia. Se impartió a los sujetos del estudio sesiones individuales y grupales centradas en alimentación, ejercicio y actividades sociales.

En otro estudio que se llevó a cabo en Australia, a quienes corrían el riesgo de tener demencia les ofrecieron sesiones de asesoramiento sobre alimentación, ejercicio y otros cambios en el estilo de vida. Obtuvieron mejores resultados en las pruebas cognitivas después de uno, dos y tres años en comparación con quienes no recibieron el asesoramiento.

Otros estudios han demostrado que comprometerse mental y socialmente ayuda a conservar las habilidades de pensamiento en el futuro y disminuir el riesgo para la enfermedad de Alzheimer. Esto incluye participar en eventos sociales, leer, bailar, jugar juegos de mesa, realizar tareas artísticas, tocar un instrumento y otras actividades.

Factores de riesgo

Factores de riesgo

  • La edad avanzada es el factor de riesgo más importante para la enfermedad de Alzheimer. La enfermedad de Alzheimer no es parte del proceso normal de envejecimiento. Pero, al envejecer, aumentan las probabilidades de desarrollarla.
  • El riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer es un poco más alto si un familiar de primer grado (el padre, la madre, un hermano o una hermana) tiene la enfermedad.
  • En general, hay más casos de mujeres con la enfermedad porque suelen vivir más que los hombres.
  • Varios estudios de gran magnitud hallaron que hubo un aumento en el riesgo de demencia o enfermedad de Alzheimer en personas de 50 años o más que tuvieron una lesión cerebral traumática.
  • Se sabe desde hace tiempo que el consumo de grandes cantidades de alcohol ocasiona cambios en el cerebro. En varios estudios y revisiones grandes se determinó que los trastornos por el consumo de alcohol estaban relacionados con más riesgo para demencia, en particular, con la demencia de aparición temprana.
  • Según las investigaciones, los patrones de sueño irregulares, como la dificultad para conciliar el sueño o permanecer dormido, se asocian con más riesgo para la enfermedad de Alzheimer.

Tratamiento

Tratamiento

Los tratamientos para la enfermedad de Alzheimer incluyen fármacos que ayudan con los síntomas y otros medicamentos más nuevos que permiten desacelerar el deterioro del pensamiento y la funcionalidad. Estos medicamentos más nuevos están aprobados para personas con enfermedad de Alzheimer en etapa temprana.

Medicamentos

Los medicamentos para la enfermedad de Alzheimer ayudan con los síntomas de la memoria y otros cambios cognitivos. Actualmente, hay dos tipos de medicamentos para tratar los síntomas:

  • Inhibidores de la colinesterasa. Estos medicamentos mejoran los niveles de comunicación intercelular. Estos medicamentos preservan un neurotransmisor que la enfermedad de Alzheimer extingue en el cerebro. Suelen ser los primeros medicamentos que se administran y la mayoría de las personas muestra mejoras razonables en los síntomas.
  • Memantina (Namenda). Este medicamento actúa en otra red de comunicación neuronal y desacelera el avance de los síntomas en los casos moderados o graves de la enfermedad de Alzheimer. A veces, se lo combina con un inhibidor de la colinesterasa. Entre los efectos secundarios relativamente inusuales están mareos y confusión.

Creación de un entorno de seguridad y contención

Una parte importante de cualquier plan de tratamiento es la adaptación a las necesidades de una persona con enfermedad de Alzheimer. Establece y fortalece los hábitos de rutina y reduce las tareas que requieran el uso de la memoria. Estas medidas pueden hacer que la vida sea mucho más fácil.