Tratamiento

Tratamiento

El tratamiento para los golpes de calor se enfoca en enfriar el cuerpo a una temperatura normal para prevenir o reducir el daño al cerebro y a los órganos vitales. Para hacerlo, el médico puede tomar estas medidas:

  • Sumergirte en agua fría. Se ha demostrado que la manera más eficaz de reducir la temperatura corporal central de forma rápida es tomar un baño de agua fría o helada. Cuanto más rápido puedan sumergirte en agua fría, menor será el riesgo de muerte o lesiones a los órganos.
  • Usar técnicas de enfriamiento por evaporación. Si no es posible sumergirte en agua fría, los trabajadores de la salud pueden intentar reducir tu temperatura corporal mediante un método por evaporación. Se vaporiza agua fría a la vez que se abanica aire caliente sobre el cuerpo, lo que hace que el agua se evapore y enfríe la piel.
  • Envolverte en hielo y mantas de enfriamiento. Otro método es envolverte en una manta especial de enfriamiento y aplicar compresas de hielo en la ingle, el cuello, la espalda y las axilas para bajar la temperatura.
  • Darte medicamentos para detener los escalofríos. Si los tratamientos para bajar la temperatura corporal te dan escalofríos, el médico puede darte un relajante muscular, como una benzodiacepina. Los escalofríos aumentan la temperatura corporal, y hacen que el tratamiento sea menos efectivo.

Síntomas

Hernia de hiato

Una hernia de hiato se presenta cuando la parte superior del estómago sobresale a través del músculo grande que separa el abdomen y el pecho. Este músculo se denomina diafragma
y tiene una pequeña abertura denominada hiato. El conducto que se usa para tragar alimentos, llamado esófago, pasa a través del hiato antes de conectarse con el estómago. Cuando hay una hernia de hiato, el estómago sube a través de esta abertura hacia el interior del pecho.

Una hernia de hiato pequeña generalmente no causa problemas. Probablemente, ni siquiera sabrías que la tienes, a no ser que el equipo de atención médica la descubra al revisar otra afección.

Sin embargo, una hernia de hiato grande puede permitir que la comida y el ácido refluyan al esófago, lo que puede causar acidez estomacal. Las medidas de autocuidado o los medicamentos generalmente pueden aliviar estos síntomas. Una hernia de hiato muy grande quizás requiera cirugía.

Síntomas

En su mayoría, las hernias de hiato pequeñas no causan síntomas, pero las más grandes pueden causar lo siguiente:

  • Acidez estomacal
  • Regurgitación, que es el retroceso del flujo de alimentos o líquidos que ya tragaste a la boca
  • Reflujo ácido, que es el retroceso de ácido estomacal al esófago
  • Dificultad para tragar
  • Dolor abdominal o en el pecho
  • Sensación de saciedad poco después de comer
  • Falta de aire
  • Vómitos con sangre o heces de color negro, lo que podría indicar que hay un sangrado en el tubo digestivo
¿Cuándo consultar al médico?

Programa una cita con tu médico u otro profesional de atención médica si tienes algún síntoma persistente que te preocupa.

Causas

Causas

Una hernia de hiato se genera cuando el tejido muscular debilitado permite que el estómago forme una protuberancia a través del diafragma. No está claro por qué ocurre esto. A continuación, se presentan algunas causas posibles de la hernia de hiato:

  • Cambios en el diafragma por la edad
  • Lesiones en esta parte del cuerpo, por ejemplo, después de un traumatismo o ciertas clases de cirugía.
  • Nacimiento con un hiato muy grande
  • Presión constante e intensa en los músculos circundantes, que puede ocurrir por toser, vomitar, hacer mucho esfuerzo durante la defecación, hacer ejercicio o levantar objetos pesados

Factores de riesgo

Factores de riesgo

La hernia de hiato es más común en estos casos:

  • La incidencia de hernia de hiato aumenta con la edad, especialmente después de los 50 años.
  • El exceso de peso corporal puede aumentar la presión en el abdomen, lo que puede contribuir al desarrollo de una hernia de hiato.
  • Fumar puede debilitar el diafragma y otros músculos, aumentando el riesgo de hernia.
  • Levantar objetos pesados o realizar esfuerzos físicos intensos puede aumentar la presión intraabdominal.
  • El aumento de la presión abdominal durante el embarazo puede contribuir al desarrollo de una hernia de hiato.
  • Condiciones que debilitan los músculos del diafragma pueden facilitar el desarrollo de una hernia de hiato.

Diagnóstico

Diagnóstico

Por lo general, una hernia de hiato se descubre durante una prueba o un procedimiento para determinar la causa de la acidez estomacal o del dolor en el pecho o en la parte superior del abdomen. Dichas pruebas o procedimientos incluyen los siguientes:

  • Radiografía del aparato digestivo superior. Para estas radiografías, el paciente debe beber un líquido blanquecino que recubre la mucosa interna del tubo digestivo. El líquido le permite al equipo de atención médica ver el contorno del esófago, del estómago y del intestino delgado.
  • Endoscopia, que es un procedimiento para observar el esófago y el estómago. La endoscopia consiste en examinar el sistema digestivo con un endoscopio, que es un tubo largo y delgado que tiene una cámara diminuta. El endoscopio se introduce por la garganta para observar el interior de tu esófago y estómago y verificar si hay inflamación.
  • Manometría esofágica, una prueba para medir las contracciones musculares del esófago. Esta prueba mide las contracciones musculares rítmicas del esófago al tragar. La manometría esofágica también mide la coordinación y la fuerza que usan los músculos del esófago.

Prevención

Prevención

Realizar algunos cambios en el estilo de vida puede ayudar a prevenir o controlar los síntomas causados por una hernia de hiato. Intenta hacer lo siguiente:

  • Realiza varias comidas pequeñas durante el día en lugar de pocas comidas abundantes.
  • No comas alimentos que te provoquen acidez estomacal. Estos incluyen alimentos grasosos o frituras, salsa de tomate, alcohol, chocolate, menta, ajo, cebolla y cafeína.
  • Evita recostarte después de comer o comer tarde en el día.
  • Mantén un peso saludable.
  • Deja de fumar.
  • Eleva la cabecera de la cama 20 cm.

Tratamiento

Tratamiento

En su mayoría, las personas con una hernia de hiato no presentan ningún síntoma y no necesitan tratamiento. Si tienes síntomas, como acidez estomacal frecuente y reflujo ácido, es posible que necesites medicamentos o cirugía.

Si tienes acidez estomacal y reflujo ácido, el profesional de atención médica puede recomendarte lo siguiente:

  • Antiácidos que neutralizan el ácido estomacal. Los antiácidos podrían ofrecer un alivio rápido. El uso excesivo de algunos antiácidos puede causar efectos secundarios, como diarrea o, a veces, problemas de riñón.
  • Medicamentos para reducir la producción de ácido. Estos medicamentos se conocen como bloqueadores de los receptores H2. Las formas más potentes de estos medicamentos se venden con receta médica.
  • Medicamentos que bloquean la producción de ácido y curan el esófago. Estos medicamentos se conocen como inhibidores de la bomba de protones. Son bloqueadores de la producción de ácido más fuertes que los bloqueadores de los receptores H2 y le dan tiempo al tejido esofágico dañado de curarse.

A veces, una hernia de hiato requiere cirugía. La cirugía puede ayudar a las personas que no mejoran con medicamentos a aliviar la acidez estomacal y el reflujo ácido. También puede ayudar a las personas que tienen complicaciones como inflamación grave o estrechamiento del esófago.

Síntomas

Herpes Zóster

El herpes zóster es una infección viral que causa una erupción dolorosa. Los herpes zóster pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo. Por lo general, parece una sola franja de ampollas que envuelve el lado izquierdo o derecho del torso.

La causa del herpes zóster es el virus varicela-zóster, el mismo virus que provoca la varicela. Después de contraer varicela, el virus permanece en el cuerpo de por vida. Años más tarde, el virus puede reactivarse como herpes zóster.

El herpes zóster no pone en riesgo la vida. Sin embargo, puede ser muy doloroso. Las vacunas pueden ayudar a reducir el riesgo de desarrollar herpes zóster. El tratamiento temprano puede acortar una infección por herpes zóster y disminuir la posibilidad de complicaciones.

La complicación más común es la neuralgia posherpética. Se trata de una afección dolorosa que hace que el herpes zóster duela durante mucho tiempo después de que las ampollas desaparecieron.

Síntomas

Los síntomas del herpes zóster suelen afectar solo una pequeña sección de un lado del cuerpo. Entre estos síntomas, se pueden incluir los siguientes:

  • Dolor, ardor u hormigueo.
  • Sensibilidad al tacto.
  • Sarpullido rojo que aparece unos días después del dolor.
  • Ampollas llenas de líquido que se abren y forman costras.
  • Picazón.

El dolor suele ser el primer síntoma del herpes zóster. Para algunas personas, el dolor puede ser intenso. Según la ubicación del área adolorida, a veces puede confundirse con problemas del corazón, los pulmones o los riñones. Algunas personas con herpes zóster sienten dolor sin llegar a tener sarpullido.

Lo más habitual es que el sarpullido del herpes zóster se manifieste como una franja de ampollas que envuelve el lado izquierdo o derecho del torso. En ocasiones, esta erupción se produce alrededor de un ojo o en uno de los lados del cuello o la cara.

¿Cuándo consultar al médico?

Consulta con tu proveedor de atención médica tan pronto como sea posible si sospechas que sufres herpes zóster, especialmente en las siguientes situaciones:

  • Tienes dolor y sarpullido cerca de un ojo. Si no se trata, esta infección puede derivar en daños permanentes en los ojos.
  • Tienes 50 años o más. La edad aumenta el riesgo de complicaciones.
  • Tú o alguien de tu familia tiene un sistema inmunitario debilitado. Esto puede deberse a cáncer, medicamentos o una enfermedad crónica.
  • El sarpullido es generalizado y doloroso.

Factores de riesgo

Factores de riesgo

Cualquiera que haya tenido varicela puede desarrollar herpes zóster. La mayoría de los adultos tuvieron varicela cuando eran niños. Esto fue antes de la disponibilidad de la vacunación infantil de rutina que ahora protege contra la varicela. Entre los factores que pueden aumentar tu riesgo de desarrollar herpes zóster se incluyen los siguientes:

  • Edad. El riesgo de tener herpes zóster aumenta con la edad. El herpes zóster, por lo general, se produce en personas mayores de 50 años. Y las personas mayores de 60 años son más propensas a sufrir complicaciones más graves.
  • Algunas enfermedades. Las enfermedades que debilitan tu sistema inmunitario, como el VIH o SIDA y el cáncer, pueden aumentar tu riesgo de desarrollar herpes zóster.
  • Tratamientos oncológicos. La radiación o la quimioterapia pueden reducir tu resistencia a las enfermedades y desencadenar el herpes zóster.
  • Algunos medicamentos. Los medicamentos que previenen el rechazo de órganos trasplantados pueden aumentar el riesgo de tener herpes zóster. El uso a largo plazo de esteroides, como la prednisona, también puede aumentar el riesgo de tener herpes zóster.

Tratamiento

Tratamiento

No hay cura para el herpes zóster. Si se lo trata sin demora con antivirales bajo receta médica se puede acelerar la recuperación y reducir el riesgo de complicaciones.

El herpes zóster puede causar un dolor intenso, por lo que el proveedor de atención médica también podría recetarte:

  • Un parche de capsaicina tópica
  • Anticonvulsivos, como la gabapentina
  • Antidepresivos tricíclicos, como la amitriptilina
  • Anestésicos, como la lidocaína, en crema, gel, espray o parche para la piel
  • AUna inyección que podría ser de corticoides o de anestésico local

Habla con tu médico sobre los beneficios y los posibles efectos secundarios de los medicamentos que te receten.

El herpes zóster generalmente dura entre 2 y 6 semanas. La mayoría de las personas contraen herpes zóster solo una vez, pero es posible contraerlo dos veces o más.

Autocuidados

Para aliviar el dolor y la comezón, toma un baño con agua fría o coloca compresas húmedas y frías sobre las ampollas. Asimismo, y si es posible, intenta reducir el estrés en tu vida.