Causas
La gripe es causada por virus. Estos virus viajan por el aire en gotitas cuando alguien que tiene la infección tose, estornuda o habla. Puedes inhalar las gotitas de forma directa. También puedes entrar en contacto con los gérmenes mediante un objeto, como el teclado de una computadora, y luego transferirlos a los ojos, la nariz o la boca.
Las personas que tienen el virus probablemente contagien aproximadamente desde el día anterior a que aparezcan los síntomas hasta cinco a siete días después de que comiencen. Los niños y las personas con un sistema inmunitario debilitado quizás sean contagiosos por un tiempo un poco más largo.
Los virus de la influenza cambian constantemente y a menudo aparecen nuevas cepas. Si tuviste influenza en el pasado, tu cuerpo ya produjo anticuerpos para combatir esa cepa específica del virus.
Si los virus futuros de la influenza son similares a los que ya tuviste debido a la enfermedad o por haber recibido la vacuna, esos anticuerpos pueden prevenir la infección o reducir su gravedad.
Sin embargo, los niveles de anticuerpos pueden disminuir con el tiempo. Además, es posible que los anticuerpos contra los virus de la influenza no te protejan contra las nuevas cepas del virus. Las nuevas cepas pueden ser muy diferentes a las que tuviste antes.