Factores de riesgo

Factores de riesgo

Muchos factores pueden aumentar el riesgo de padecer un accidente cerebrovascular.

Factores de riesgo relacionados con el estilo de vida
  • Sobrepeso u obesidad
  • Inactividad física
  • Beber en exceso o darse atracones de bebida
  • Presión arterial alta
  • Fumar cigarrillos o la exposición al humo de segunda mano
  • Colesterol alto
  • Diabetes
  • Apnea obstructiva del sueño
  • Enfermedad cardiovascular, que incluye insuficiencia cardíaca, defectos cardíacos, infección cardíaca o ritmo cardíaco irregular, como fibrilación auricular
  • Antecedentes personales o familiares de accidente cerebrovascular, ataque cardíaco o accidente isquémico transitorio
  • Infección por la COVID-19

Entre otros factores asociados con un riesgo más alto para accidente cerebrovascular están los siguientes:

  • Edad: las personas de 55 años o más tienen un riesgo más alto para un accidente cerebrovascular que las personas más jóvenes.
  • Raza o etnia: las personas afroamericanas e hispanas tienen un riesgo más alto para un accidente cerebrovascular que las personas de otras razas o etnias.
  • Sexo: los hombres tienen un riesgo más alto para un accidente cerebrovascular que las mujeres.

Prevención

Prevención

Existen muchas cosas que puedes hacer para prevenir el agotamiento por calor y otras enfermedades relacionadas con el calor. Cuando las temperaturas aumentan, recuerda estos consejos:

  • Usa ropa liviana y holgada. Usar demasiada ropa o prendas muy ceñidas no permite que el cuerpo se enfríe de forma adecuada.
  • Protégete contra las quemaduras por el sol. Las quemaduras por el sol afectan la capacidad de enfriamiento del cuerpo.
  • Bebe mucho líquido. Mantenerte hidratado ayuda a tu cuerpo a sudar y a mantener una temperatura normal.
  • Ten cuidado con ciertos medicamentos. Presta atención a los problemas relacionados con el calor si tomas medicamentos que pueden afectar la capacidad del cuerpo para mantenerse hidratado y responder al calor.
  • Nunca dejes a nadie en un automóvil estacionado. Esta es una causa frecuente de muerte asociada al calor en niños. Cuando estacionas al sol, la temperatura en el automóvil puede elevarse 11 °C en 10 minutos.

Diagnóstico

Diagnóstico

Durante un accidente cerebrovascular, la atención se brinda rápidamente una vez que llegas al hospital. Tu equipo de emergencia trata de averiguar qué tipo de accidente cerebrovascular estás teniendo. Es probable que te hagan una tomografía computarizada u otra prueba por imágenes poco después de tu llegada.

Pruebas
  • Examen físico. El médico realiza varias pruebas, como escuchar el corazón y controlar la presión arterial. El examen neurológico sirve para ver cómo un posible accidente cerebrovascular puede estar afectando el sistema nervioso.
  • Análisis de sangre. Es probable que deban hacerte análisis para comprobar el tiempo de coagulación de la sangre y si los niveles de glucosa en la sangre son altos o bajos. También pueden realizarte este tipo de pruebas para comprobar si tienes una infección.
  • Tomografía computarizada. Una tomografía computarizada utiliza una serie de rayos X para crear una imagen detallada del cerebro. Puede mostrar sangrado en el cerebro, un accidente cerebrovascular isquémico, un tumor u otras afecciones.
  • Resonancia magnética. Una resonancia magnética usa potentes ondas de radio y un campo magnético para crear una vista detallada del cerebro. La prueba puede detectar tejido cerebral dañado por un accidente cerebrovascular isquémico y hemorragias cerebrales.
  • Ecografía de la carótida. En esta prueba, las ondas sonoras crean imágenes detalladas del interior de las arterias carótidas en el cuello. La ecografía de la carótida muestra la acumulación de depósitos de grasa, denominados placas, y el flujo sanguíneo en las arterias carótidas.

Prevención

Prevención

Puedes tomar medidas para prevenir un accidente cerebrovascular. Es importante que conozcas los factores de riesgo para un accidente cerebrovascular y sigas los consejos de tu profesional de atención médica sobre estrategias para un estilo de vida saludable.

  • Controlar la presión arterial alta, conocida como hipertensión. Esta es una de las cosas más importantes que puedes hacer para reducir el riesgo de accidente cerebrovascular. Si tuviste un accidente cerebrovascular, bajar la presión arterial puede ayudar a prevenir un accidente isquémico transitorio o un accidente cerebrovascular en el futuro.
  • Reducir la cantidad de colesterol y grasas saturadas en tu alimentación. Comer menos colesterol y grasas, especialmente grasas saturadas y grasas trans, puede reducir la acumulación en las arterias.
  • Mantener un peso saludable. El sobrepeso contribuye a otros factores de riesgo para accidente cerebrovascular, como la presión arterial alta, las enfermedades cardiovasculares y la diabetes.
  • Mantener un peso saludable. El sobrepeso contribuye a otros factores de riesgo para accidente cerebrovascular, como la presión arterial alta, las enfermedades cardiovasculares y la diabetes.
  • Mantén una alimentación con abundantes frutas y verduras. Comer cinco o más porciones de frutas o verduras todos los días puede reducir el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular.
  • Hacer ejercicio con regularidad. El ejercicio aeróbico reduce el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular de muchas maneras. El ejercicio puede reducir la presión arterial, aumentar los niveles de colesterol bueno y mejorar la salud general de los vasos sanguíneos y el corazón.

Tratamiento

Tratamiento

El tratamiento de emergencia depende de si estás teniendo un accidente cerebrovascular isquémico o hemorrágico. Durante un accidente cerebrovascular isquémico, los vasos sanguíneos del cerebro están obstruidos o estrechados. Durante un accidente cerebrovascular hemorrágico, hay sangrado en el cerebro.

Para tratar un accidente cerebrovascular isquémico, se debe restablecer el flujo de sangre que va al cerebro de inmediato. Esto se puede hacer con lo siguiente:

  • Medicamentos para administración intravenosa de emergencia. Los medicamentos para administración intravenosa que pueden disolver un coágulo deben inyectarse dentro de las 4 horas y media desde el momento en que aparecieron los síntomas. Cuanto antes se administre el medicamento, mejor. El tratamiento rápido mejora las posibilidades de supervivencia y puede reducir las complicaciones.

Rehabilitación

Después del tratamiento de emergencia, se te vigilará de cerca durante al menos un día. Después, la atención médica del accidente cerebrovascular se enfoca en ayudarte a recuperar la mayor cantidad de funciones posibles y volver a la vida independiente. El impacto del accidente cerebrovascular depende de la zona del cerebro afectada y de la cantidad de tejido dañado.

La mayoría de las personas que tuvieron un accidente cerebrovascular acuden a programas de rehabilitación.

Es posible que la rehabilitación comience antes de que te den el alta hospitalaria. Después del alta, puedes continuar el programa en una unidad de rehabilitación del mismo hospital, ir a otra unidad de rehabilitación o ir a un centro de enfermería especializada como paciente ambulatorio. También puedes hacer rehabilitación en casa.

Síntomas

Absceso dental

Un absceso dental es una acumulación de pus causada por una infección bacteriana. El absceso puede producirse en diferentes zonas cerca del diente por distintos motivos. Un absceso periapical se produce en la punta de la raíz, mientras que un absceso periodontal se produce en las encías, al lado de la raíz del diente. La información que se incluye aquí es sobre los abscesos periapicales.

En general, un absceso periapical en el diente se produce como consecuencia de caries dentales no tratadas, una lesión o un arreglo dental anterior. Los dentistas tratarán el absceso dental drenándolo y sacando la infección. Es posible que puedan salvar el diente con un tratamiento conocido como procedimiento del canal radicular. Sin embargo, en algunos casos, es posible que se deba extraer el diente. Dejar un absceso dental sin tratar puede provocar complicaciones graves e, incluso, potencialmente mortales.

Síntomas

Los signos y los síntomas de un absceso dental incluyen los siguientes:

  • Dolor de muela intenso, constante y palpitante que puede extenderse hasta la mandíbula, el cuello o el oído
  • Dolor o molestia ante temperaturas frías y calientes
  • Dolor o molestia al masticar o morder
  • Fiebre
  • Hinchazón en la cara, las mejillas o el cuello que puede provocar dificultad para respirar o tragar
  • Inflamación y sensibilidad en los ganglios linfáticos debajo de la mandíbula o en el cuello
  • Olor desagradable en la boca
  • La boca se inunda repentinamente de líquido salado con olor y gusto desagradables y alivio del dolor, si se rompe el absceso
¿Cuándo consultar al médico?

Si tienes fiebre e hinchazón en la cara y no puedes comunicarte con el dentista, ve a la sala de emergencias. También debes ir a la sala de emergencias si tienes dificultad para respirar o tragar. Estos síntomas pueden indicar que la infección se ha extendido más profundamente en la mandíbula, la garganta o el cuello, o incluso en otras áreas del cuerpo.

Consulta con tu dentista de inmediato si tienes algún signo o síntoma de absceso dental.

Causas

Causas

Un absceso dental periapical se produce cuando las bacterias invaden la pulpa dental. La pulpa dental es la parte más profunda del diente que contiene vasos sanguíneos, nervios y tejido conectivo.

Las bacterias ingresan a través de una caries o por una grieta o rajadura en el diente y se extienden hasta llegar a la raíz. La infección bacteriana puede provocar hinchazón e inflamación en la punta de la raíz.

Un absceso dental no desaparecerá a menos que lo trates. Si el absceso se rompe, el dolor puede mejorar mucho y te hará creer que el problema se ha ido, pero aún necesitas recibir tratamiento dental.

Si el absceso no drena, la infección puede extenderse a la mandíbula y a otras áreas de la cabeza y el cuello. Si el diente se encuentra cerca de los senos maxilares (dos espacios grandes debajo de los ojos y detrás de las mejillas), también puedes desarrollar una abertura entre el absceso y los senos paranasales. Esto puede causar una infección en la cavidad de los senos paranasales. Incluso podrías desarrollar una septicemia, que es una infección potencialmente mortal que se propaga por todo el cuerpo.

Si tienes un sistema inmunitario debilitado y dejas un absceso dental sin tratar, el riesgo de que se propague una infección aumenta aún más.

Diagnóstico

Diagnóstico

Además de examinar el diente y el área alrededor de este, el dentista puede hacer lo siguiente:

  • Dar pequeños golpecitos en los dientes. Un diente que tiene un absceso en la raíz suele ser sensible al tacto o a la presión.
  • Recomendar una radiografía. Una radiografía del diente doloroso puede ayudar a identificar un absceso. El dentista también puede usar la radiografía para determinar si la infección se ha extendido y ha causado abscesos en otras áreas.
  • Recomendar una tomografía computarizada. Si la infección se ha extendido a otras áreas en el cuello, se puede usar una tomografía computarizada para determinar la gravedad de la infección.

Factores de riesgo

Factores de riesgo

Estos factores pueden aumentar el riesgo de padecer un absceso dental:

  • Malos hábitos y cuidados dentales. No tener los cuidados adecuados de los dientes y las encías, como no cepillarte los dientes dos veces al día y no usar hilo dental, puede aumentar el riesgo de problemas dentales. Estos problemas pueden incluir caries dentaria, enfermedad de las encías, abscesos dentales y otras complicaciones de la boca y los dientes.
  • Una alimentación con alto contenido de azúcar. Comer y beber frecuentemente productos con alto contenido de azúcar, como dulces y gaseosas, puede contribuir a la formación de caries, que pueden provocar abscesos dentales.
  • Sequedad en la boca. Tener la boca seca puede aumentar el riesgo de caries dentarias. Por lo general, la boca seca se debe al efecto secundario de determinados medicamentos o problemas relacionados con el envejecimiento.

Prevención

Prevención

Evitar las caries dentarias es fundamental para prevenir los abscesos dentales.

Cuida bien tus dientes para evitar que se formen caries dentarias:

  • Bebe agua con fluoruro.
  • Cepíllate los dientes durante dos minutos al menos dos veces al día usando pasta dental con fluoruro.
  • Usa hilo dental para limpiar entre los dientes todos los días.
  • Reemplaza el cepillo de dientes cada 3 o 4 meses, o cuando veas que las cerdas están deshilachadas.
  • Ingiere alimentos saludables, limita la ingesta de productos azucarados y de refrigerios entre comidas.
  • Visita periódicamente al dentista para hacer controles y limpiezas profesionales.
  • Considera usar un enjuague bucal antiséptico o con fluoruro para sumar una capa adicional de protección contra la caries dentaria.