Recomendaciones sobre el azúcar añadido
Las guías dietéticas recomiendan
que no más de entre 5 y 15% de
las calorías diarias provengan de
azúcares añadidos y grasas sólidas.
Esto significa que no más de 100
calorías diarias deben provenir de
azúcares añadidos en las mujeres y
150 en los hombres. Esto se traduce
en unas seis cucharaditas de azúcar
añadido en mujeres y nueve en
hombres.
Desgraciadamente, la mayoría
de la gente consume más de 22
cucharaditas o 355 calorías de
azúcar añadido al día, lo que supera
de lejos estas recomendaciones.
Para mantener a raya el azúcar
de tu dieta, sigue estas dos
recomendaciones:
- Mídete en el consumo de
bebidas y alimentos con
azúcares simples agregadas. - Toma jugo de fruta natural o
fruta fresca, sin ponerle azúcar,
siempre que sea posible.
¿Por qué el azúcar añadido es un problema?
Los alimentos con mucha azúcar contribuyen a aumentar
calorías de la dieta y tiene poco valor nutrimental. Además,
el azúcar añadido se encuentra a menudo en alimentos
que también contienen grasas sólidas.
Ingerir demasiados alimentos con azúcares añadidos y grasas
sólidas provocan problemas potenciales de salud, por ejemplo:
- Alimentación pobre.
Si te llenas con alimentos cargados de azúcar añadido,
puede que a tu alimentación le falten alimentos nutritivos,
lo que significa que podrías estar perdiendo importantes
nutrientes, vitaminas y minerales. El refresco aquí juega un
papel importante. Es fácil llenarse con bebidas azucaradas y
dejar de lado la leche descremada o el agua, lo que agregará
grandes cantidades de azúcar y calorías extra a tu dieta y
ningún valor nutricional. - Aumento de peso.
Muchos alimentos y bebidas contienen mucha azúcar, lo que
los convierte en densos en calorías. Cuando ingieres este tipo
de alimentos, es fácil consumir más calorías. - Aumento de triglicéridos. Los triglicéridos son un tipo de
grasa que se encuentra en el torrente sanguíneo y en el
tejido adiposo. Ingerir una gran cantidad de azúcar añadido
puede aumentar los niveles de triglicéridos, que a su vez
aumentan el riesgo de sufrir enfermedades cardiacas. - Deterioro dental.
Todas las formas del azúcar promueven el deterioro dental al
permitir que las bacterias proliferen y crezcan. Mientras más
ingieras alimentos y bebidas con azúcar natural o añadido,
más probable será que desarrolles caries, especialmente si no
mantienes una buena higiene bucal.