Los beneficios de dejar de fumar

Beneficios
  • Los sentidos del gusto y el olfato mejorarán.
  • Es posible que respires con mayor facilidad, y tu tos de fumador empezará a desaparecer, aunque tal vez aún tengas tos y expectores moco durante un tiempo.
  • Quizá también notes una mejoría de tu vitalidad.
  • En el transcurso de 24 horas, las concentraciones de monóxido de carbono y nicotina en tu sistema disminuirán de manera significativa.
  • Los efectos del tabaquismo sobre la bronquitis empezarán a revertirse desde el primer día que abandones el hábito.
  • Aunque los efectos del enfisema son irreversibles, se hace más fácil la respiración y se lentifica la progresión de la enfermedad.
  • Hacia el final de tu primer año sin fumar, tu riesgo de ataque cardiaco disminuirá a la mitad, y a los cinco años será casi el mismo que el de individuos que nunca han fumado.
  • Dejar de fumar disminuye inmediatamente las probabilidades de cáncer de esófago y de páncreas.
  • En el transcurso de siete años, tu riesgo de cáncer de la vejiga disminuirá hasta el propio de una persona no fumadora.
  • Luego de 10 a 15 años de no fumar, tu riesgo estadístico de adquirir cáncer de pulmón, laringe o boca se aproximará al de personas que nunca han fumado.
  • Te sentirás mejor acerca de ti mismo y de tus habilidades.
  • Quienes te rodean se beneficiarán por no inhalar humo de tus cigarrillos.
  • Te desharás de las cosas desagradables relacionadas con fumar: mal aliento, dientes amarillos, y olor desagradable en las ropas y el pelo.
  • Pondrás el ejemplo correcto a tus hijos, nietos y amigos.

Cómo afrontar un desliz

Afronta

Un desliz ocurre cuando un exfumador se coloca en una situación en la cual habría fumado en el pasado, pero carece de un plan para afrontarla sin un cigarrillo, o es incapaz de resistirse cuando alguien le ofrece uno.

Los deslices ocurren. Puede ser una bocanada o días de fumar. Lo que hay que recordar es que un desliz no significa fracaso. Sigue estos consejos para que un desliz no te haga regresar a fumar:

1. Suspende lo que esté haciendo. Deja de fumar y tira todos tus cigarrillos. Toma un descanso o sal a caminar, y date tiempo para pensar. Llama a un amigo o un profesional para que te ayude a volver al camino.

2. Evalúa y aprende. Si te estás reprendiendo por fumar un cigarrillo, deja de hacerlo. Aprovecha esta oportunidad para recobrar el aliento, evaluar qué pasó y hacer un nuevo plan. Al analizar qué sucedió, puedes aprender acerca de los riesgos que encaraste y modificar tu método para abandonar el hábito.

3. Regresa al camino. Revisa tu plan para dejar de fumar y deduce en qué aspectos puedes mejorarlo. Si tu desliz ocurrió durante varios días, quizá desees usar productos de reemplazo de nicotina. Sigue tu plan original respecto a qué tanto de ese medicamento vas a usar y con qué frecuencia. Si tienes preguntas, consulta a tu médico.

Qué esperar cuando deja de fumar

Qué esperar cuando dejas de fumar

  • Inmediatamente después de abandonar el hábito quizá te sientas más hambriento, cansado y de mal humor.
  • El incremento del hambre y la mejora de tus sentidos del gusto y el olfato pueden dar por resultado un aumento modesto de peso.
  • Tal vez tengas fuertes deseos de un cigarrillo y encuentres difícil concentrarte y mantener tu atención.
  • Quizá también tengas problemas para dormir y experimentes un incremento temporal de la tos.

Los síntomas de supresión de nicotina dependen de que tu cuerpo se está deshaciendo por sí mismo de la nicotina. La mayor parte de la nicotina se habrá eliminado en el transcurso de tres días, pero el deseo de tu cuerpo tal vez continúe más tiempo.

Cómo dejar de fumar

Deja de fumar

Dado que la nicotina es una droga adictiva, dejar de fumar puede ser muy difícil. De hecho, la mayoría de las personas fracasa en su primer intento. Si no tienes éxito la primera vez, no dejes de intentarlo. Sigue estos pasos.

1. Crea un plan para dejar de fumar

 Convertirse en una persona libre de humo es resultado de planeación y compromiso, no de suerte. Ayuda crear un plan para dejar de fumar que combine diversas estrategias o planes de acción, para:

  • Afrontar síntomas de abstinencia de nicotina
  • Vencer deseos de fumar
  • Obtener apoyo y guía sociales, cuando sea necesario

No esperes encontrar un plan para dejar de fumar ya elaborado. Ningún plan funciona para todas las personas. Crea un plan para dejar de fumar con el cual te sientas cómodo y que se adapte a tu estilo de vida. Elige estrategias, técnicas y recursos que satisfagan tus necesidades.

2. Estrategias para dejar de fumar

El médico es un valioso recurso conforme creas tu plan para dejar de fumar y trabajas para convertirte en una persona libre de humo. A continuación se presentan algunas estrategias para ayudarte a dejar de fumar:

Autoayuda.

 Este método incluye trabajar por sí mismo para dejar de fumar. Comprende usar recursos de salud para planear tus esfuerzos y mantenerlos. Los recursos pueden incluir publicaciones y sitios de Internet patrocinados por organizaciones de salud nacionales.

Una estrategia de este tipo es importante para crear motivación y confianza. El conocimiento que obtienes te ayuda a manejar las ansias de fumar y a evitar situaciones de alto riesgo para fumar.

Apoyo de grupo.

Para algunas personas, el apoyo de un grupo es trascendental para tener éxito en dejar de fumar. El grupo, encabezado por un líder, se reúne con regularidad en un programa de tratamiento organizado. Estos programas por lo general ofrecen múltiples sesiones durante por lo menos dos semanas; cada sesión dura 20 a 60 minutos. Las sesiones se enfocan en capacitación en la resolución de problemas, y en habilidades para dejar de fumar. Proporcionan el apoyo social de otras personas que están lidiando con problemas similares.

Asesoramiento individual.

Este método incluye trabajo individual con un médico, un psicólogo, una enfermera o un consejero en quien se confíe,para recibir consejos y apoyo profesionales. Los profesionales capacitados te permiten expresar tus sentimientos, tus temores de ser incapaz de suspender el hábito, o problemas con familiares o amigos. Te ayudan a adquirir habilidades de afrontamiento, superar obstáculos y aprender a vivir sin fumar. Puedes ponerte en contacto con tu consejero cuando experimentes síntomas de abstinencia o necesites ayuda para manejar el deseo de fumar.

Abstinencia inmediata y completa.

Es el método que se utiliza con mayor frecuencia para dejar de fumar. Es una interrupción repentina y decisiva del consumo de cigarrillos. En un día elegido, dejas de fumar por completo, con poca o ninguna reducción previa. La abstinencia inmediata y completa no es algo que hagas por capricho. Requiere preparación, desde los puntos de vista físico y emocional, para soportar el fuerte deseo de fumar. Por lo general se recomienda alguna forma de medicamento para fumadores que usan este método.

Medicamento.

Ayuda a aliviar los síntomas de abstinencia por adicción a nicotina en tanto terminan los peores efectos. También te permite enfocarte en otras preocupaciones, como modificar conductas que conducen a fumar. Pero recuerda que cualquier medicamento que decidas usar sólo es un auxiliar. Necesitarás estar listo desde el punto de vista psicológico para abandonar el hábito. Tú y tu médico pueden decidir cuál medicamento es correcto para ti.

Se usan dos tipos básicos de medicamento: medicamentos sin nicotina diseñados para reducir el ansia de consumir nicotina, y productos de reemplazo de nicotina. Estos últimos suministran nicotina al cerebro por medio del torrente sanguíneo, sin fumar. A medida que la dependencia de la nicotina se debilita, disminuyes de manera gradual el uso de los medicamentos. La reducción gradual de tu dosis de reemplazo de nicotina aminora las probabilidades de síndrome de abstinencia. Los productos de reemplazo de nicotina vienen en diversas formas, entre ellas un parche, aerosol nasal, inhalador o goma de mascar.

Parche de nicotina:

libera una dosis constante de nicotina hacia el torrente sanguíneo a través de la piel. Casi todos los productos de parche de nicotina están disponibles sin prescripción. Los parches se usan a diario durante seis o 12 semanas. Son muy eficaces, pero no son una curación mágica. A veces se irrita la piel. Después de quitar el parche, aplica crema de hidrocortisona sobre el área de piel afectada a fin de ayudar a aliviar la irritación. Aplica el parche en un sitio diferente cada día para disminuir la irritación de la piel.

Aerosol nasal de nicotina:

suministra nicotina hacia el torrente sanguíneo mediante el revestimiento de la nariz. Entre los productos para el reemplazo de nicotina, proporciona el alivio más rápido de lossíntomas de abstinencia. El aerosol nasal sólo está disponible con receta médica. Puede causar una sensación caliente y picante en la nariz, junto con tos y estornudos, lagrimeo, e irritación de la garganta. Estos efectos disminuyen en el transcurso de la primera semana de uso.

Inhalador de nicotina:

Semeja un cigarrillo corto con una pieza de plástico para la boca. Sin embargo, la nicotina no se inhala. Más bien, se toman bocanadas, lo que permite que la nicotina se absorba hacia el torrente sanguíneo a través del recubrimiento de la boca. El inhalador de nicotina sólo se encuentra disponible con una prescripción de un médico. Tal vez sientas irritación en la boca o la garganta. Bebe agua para aliviar cualquier dolorimiento o sequedad.

Goma de mascar con nicotina:

es una resina parecida a goma que libera nicotina hacia el torrente sanguíneo a través del revestimiento de la boca. Está disponible sin prescripción en farmacias.

Tabaquismo en adolescentes

Tabaquismo en adolescentes

  • La mayoría de quienes fuman empieza a hacerlo en etapas tempranas de la vida, generalmente antes de los 18 años.
  • Un número cada vez mayor es del sexo femenino.
  • Un alto porcentaje de los adolescentes que fuman proviene de familias en las cuales uno o ambos padres fuman.
  • El tabaquismo entre adolescentes también está relacionado con la presión por parte de compañeros.
Humo de tabaco fumado por otras personas
  • Miles de personas fallecen cada año por exposición a humo de tabaco fumado por otras personas (fumar de manera pasiva).
  • Inhalar humo de tabaco fumado por otras personas hace que el corazón lata más rápido y que aumenten la presión arterial y la concentración de monóxido de carbono en la sangre.
  • El humo de un cigarrillo que se está quemando contiene dos veces más alquitrán y nicotina que el humo inhalado, una cantidad tres veces mayor de un compuesto que causa cáncer llamado 3,4-benzpireno, cinco veces más monóxido de carbono y posiblemente 50 veces más amoniaco.
  • Los niños expuestos a humo de tabaco fumado por otras personas tienen mayor riesgo de presentar asma, infecciones de los oídos, neumonía y bronquitis.
  • Alrededor de 3,000 no fumadores mueren cada año por cáncer pulmonar como resultado de exposición a humo de tabaco fumado por otras personas.
  • Aproximadamente 40,000 no fumadores mueren cada año por enfermedad cardiovascular que sobreviene por exposición a humo de tabaco fumado por otras personas.

Signos y síntomas de dependencia de la nicotina

Signos y síntomas

  • Has hecho un intento serio,pero infructuoso de dejar de fumar o reducir la cantidad de tabaco que consumes.
  • Tus intentos por dejar de fumar han conducido a síntomas de abstinencia, como ansias de consumir tabaco o sensaciones de ansiedad, irritabilidad, frustración o enojo.
  • Problemas para concentrarte o para dormir, y un incremento del apetito con posible aumento de peso.
  • Sigues consumiendo tabaco aun cuando tienes un grave problema de salud que sabes que empeora por el consumo de tabaco.
  • Presentas una tolerancia al tabaco. Tal vez notes que un cierto número de cigarrillos al día produce menos efecto que el que solía producir, y necesitas fumar más para alcanzar el efecto deseado.

Tabaquismo y enfermedad

Tabaquismo y enfermedad

  • El consumo de tabaco es un factor de riesgo importante en muchas enfermedades, pues contiene más de 4,000 sustancias químicas, 63 carcinógenos y cantidades pequeñas de venenos, como cianuro, arsénico y formaldehÍdo.
  • El monóxido de carbono que se encuentra en el humo de cigarrillos desplaza el oxígeno de los glóbulos rojos, lo que roba oxígeno a los tejidos.
  • Los tejidos de la boca, garganta y laringe quedan afectados por la exposición repetida al humo de cigarrillo.
  • Después de que el humo pasa por la boca, los pulmones retienen entre 70 y 90% de los compuestos que usted inhala y el alquitrán del humo empieza a acumularse y a dañar sus tejidos. Cuando se enfría dentro de tus pulmones, el alquitrán forma una capa pegajosa de color pardo sobre el revestimiento de las vías respiratorias. Esta capa puede causar cáncer.

Cáncer. Fumar es un importante factor de riesgo para cánceres de boca, laringe, faringe, esófago, pulmón, estómago, páncreas, riñón, vejiga urinaria y cuello del útero.

  • Un fumador tiene dos veces más probabilidades de presentar cáncer que alguien que no fuma, y una persona que fuma mucho tiene cuatro veces más probabilidades de presentar cáncer que una no fumadora.
  • En general, el tabaquismo provoca al menos 30% de las muertes por cáncer.

Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). El tabaquismo es la principal causa de enfermedades crónicas de los pulmones, como la EPOC. Esta enfermedad comprende el enfisema y la bronquitis crónica.

  • Más del 80% de las muertes por EPOC se relaciona con fumar cigarrillos. De hecho, un fumador tiene 10 veces más probabilidades de morir por EPOC que un no fumador.

Enfermedad cardiovascular. Incluye padecimientos como presión arterial alta, enfermedad de las arterias coronarias y ataque cerebral. La nicotina incrementa temporalmente la presión arterial y la frecuencia cardiaca, mientras que el monóxido de carbono del humo de tabaco se une a la hemoglobina en la sangre, ocupa el lugar de oxígeno valioso y disminuye la cantidad de oxígeno disponible para los tejidos y los órganos. El tabaquismo también es un factor que contribuye a la acumulación de colesterol en las arterias (aterosclerosis).

  • El riesgo de enfermedad del corazón es 70% más alto entre fumadores.
  • 35% de las muertes por enfermedad del corazón relacionadas con tabaquismo ocurre antes de los 65 años de edad.
  •  Un fumador tiene dos veces más probabilidades de morir por un ataque cardiaco que un no fumador, y el riesgo es aún más alto para quienes fuman mucho.
  •  Un fumador que ha presentado un ataque cardiaco y sigue fumando tiene seis veces más probabilidades de presentar un segundo ataque cardiaco que uno que deja de fumar.

Alternativas para los cigarros

Alternativas

Cigarrillos light. Puros. Pipa. Tabaco para mascar y rapé.
Las compañías cigarreras han insinuado que los llamados cigarrillos light (aquellos que tienen bajo contenido de alquitrán y de nicotina) causan menos riesgos para la salud. Sin embargo, las características como los filtros ventilados no reducen la exposición a sustancias químicas dañinas que se encuentran en el tabaco. Además, cambiar a cigarrillos con bajo contenido de alquitrán y de nicotina no disminuye el riesgo de cáncer pulmonar, enfisema, ataque cardiaco u otras enfermedades. Al igual que fumar cigarrillos, los riesgos para la salud aumentan con el número de puros que una persona fuma cada día. Aunque muchos fumadores de puros no inhalan por completo el humo hacia los pulmones, quedan expuestos a humo en la cavidad bucal, así como al humo en el ambiente donde se fuma. Al considerar que el humo de puros contiene tantas sustancias químicas venenosas como el de cigarrillos, quienes fuman puros tienen riesgo de las mismas enfermedades relacionadas con fumar. Fumar en pipa se relaciona con cánceres del labio y la boca, y está claro que incrementa la concentración de monóxido de carbono en la sangre. Varios estudiosmuestran que el tabaco no fumado puede producir una concentración alta de nicotina en la sangre. Los riesgos para la salud incluyen cánceres de la cavidad bucal y de la garganta, en particular donde el tabaco se sostiene en la boca. El tabaco para mascar y el rapé pueden causar hinchazón y hemorragia de las encías, y conducir a pérdida de dientes. También pueden causar incremento de la frecuencia cardiaca, presión arterial más alta y latidos irregulares del corazón.