La importancia de planificar tu retiro

La importancia de planificar tu retiro

Con tantos años en esta siguiente etapa de la vida, se necesitan actividades para cubrir el día y dinero para mantenerse. Éste es el motivo por el cual la jubilación es excitante y atemorizante para muchas personas.

Tener un plan puede ayudar a manejar el estrés y la ansiedad de la jubilación y te dará una oportunidad de disfrutar esta etapa excitante de la vida.

Una vez que hayas visualizado tus prioridades, metas y esperanzas, puedes dar los pasos para alcanzarlas. Las siguientes preguntas te ayudarán a planear y soñar.

Preguntas que te ayudarán:

  • ¿Qué voy a hacer? Es importante que comiences planificando qué harás con tu tiempo. Todos queremos descansar, pero estar tirado todo el tiempo en el sillón no es una opción de vida.
  • ¿Estoy sano? Al planificar tu jubilación, considera qué tan físicamente activo será tu estilo de vida.
  • ¿Estoy financieramente estable? Vivir bien después de jubilarse requiere una planeación hábil, ahorro e investigación. Sin un buen plan y disciplina, no hay garantía de que el ingreso de la jubilación cubrirá tus gastos.
  • ¿Cuánto dinero necesitaré? Imagina cuánto dinero necesitarás para mantener el estilo de vida que te gustaría llevar. En promedio, se debe planear vivir 30 años después de la jubilación.

¿Cuál es tu propósito?

¿Cuál es tu propósito?

Las actividades significativas respaldan lo que estás tratando de obtener de la vida, y te ayudan a sentirte conectado con el motivo por el cuál vives. Te dan algo por lo cual esforzarte, una razón para vivir y un motivo para sentirte emocionado cada día.

Tener este sentido de propósito puede evitar que despiertes una mañana, veas hacia atrás en tu vida y te preguntes: ¿qué ha pasado?

Un sentido de propósito puede significar cosas diferentes para distintas personas. Para muchos de nosotros, esto incluye una sensación de que importamos, que otros dependen de nosotros, están interesados en nosotros y se preocupan acerca de lo que nos sucede.

Pasar tiempo en cosas que son significativas para ti y que disfrutes puede ayudarte a sentirte mejor acerca de ti mismo y mejorar tu estado de ánimo y actitud ante la vida.

Sin un sentido de misión, algunas personas se vuelven vulnerables a la depresión, lo cual puede llevar a un autocuidado deficiente y a problemas de salud. La sensación de que importas y que otros te necesitan también es crucial para la salud mental, según los psicólogos.

Por ello, entonces, ¿cómo encuentras tu propósito?

Crea una buena relación con tu médico

Crea una buena relación con tu médico

La mejor atención médica se obtiene cuando uno comparte información con su doctor y colabora con él. He aquí algunas maneras en que puedes ayudar a construir y fortalecer esa relación.

  • Sé puntual para tus citas. Si debes cancelar, trata de hacerlo por lo menos con 24 horas de anticipación.
  • Prepárate para las citas. Antes de cada consulta, anota un par de los problemas que te preocupan y cualquier cambio relevante dentro de tu historial de salud.
  • Contesta todas las preguntas de tu médico de manera veraz y completa. Esto ayudará al médico a vigilar mejor tu salud.

  • Asegúrate de comprender lo que se te dice. Si no comprendes algo, pide a tu médico que lo aclare hasta que lo entiendas.
  • Cuando el médico te prescriba un medicamento u otra forma de tratamiento, haz lo que te recomiende.
  • Lleva a un amigo o familiar a tu cita. Éste podrá proporcionarte apoyo moral, recordarte preguntas que deseas hacer y tomar notas para ayudarte a recordar lo que se te dijo.
  • Habla sobre exámenes preventivos. Los exámenes preventivos regulares son importantes porque le ayudan a tu médico a evaluar tu salud general y a identificar los posibles factores de riesgo para enfermedades.

Lleva una alimentación adecuada, para cuidar tu salud

Lleva una alimentación adecuada, para cuidar tu salud

Un buen estado de salud en la mediana edad es importante para llegar a la edad adulta manteniendo una vida independiente y libre de problemas de salud crónicos. Y la alimentación es una parte importante de la ecuación.

Si tu alimentación no es tan saludable como quisieras, es el momento de mejorarla. Las investigaciones indican que los adultos de entre 45 y 60 años que siguen pautas alimentarias y patrones de alimentación saludable, como la dieta mediterránea, tienen más probabilidades de mantener una buena salud física y mental a una edad avanzada.

Comienza hoy mismo a consumir más vegetales y a disminuir la ingesta de alimentos con alto contenido calórico. Por ejemplo, reemplaza esa barra de chocolate con una manzana y una cucharada de mantequilla de maní, o con vegetales y una ración individual de hummus.

Una dieta rica en frutas, vegetales y cereales integrales y con bajo contenido de grasas saturadas y carbohidratos refinados es fundamental para un buen estado de salud ahora y a medida que envejeces.

Comer bien significa disfrutar de un gran sabor, así como de una gran nutrición.

Infórmate sobre suplementos

Infórmate sobre suplementos

A diferencia de los medicamentos de prescripción y los de venta sin receta, los cuales son probados rigurosamente para comprobar sus beneficios e identificar sus riesgos, la mayoría de los suplementos dietéticos no lo son.

Y el hecho es que es mucho más probable mejorar la dieta y proteger la salud con buenos hábitos de estilo de vida que con suplementos dietéticos. Podría parecer más fácil tomar unas pastillas que preparar una comida equilibrada. El problema es que, si depende de los suplementos para su nutrición, se pierde de los beneficios potenciales de los antioxidantes, fitoquímicos, fibra y otros nutrientes que sólo los alimentos pueden proporcionar.

Tener el equilibrio correcto de vitaminas y minerales en el cuerpo es esencial. Las deficiencias de ciertas vitaminas o minerales pueden producir enfermedades o condiciones específicas, como la anemia perniciosa (deficiencia de vitamina B12) o anemia (deficiencia de hierro).

Sin embargo, demasiado de algunas vitaminas y minerales tampoco es bueno. Las cantidades excesivas de suplementos de dosis altas pueden producir reacciones tóxicas.

Es por ello por lo que es de suma importancia que consultes a tu médico antes de consumir algún suplemento. Tu médico sabrá decirte qué suplemento es bueno para ti de acuerdo con tu edad, sexo y afecciones.

¿Estás listo para jubilarte?

¿Estás listo para jubilarte?

Después de todos los planes y preparaciones viene la decisión de retirarse. ¿Estás listo? Además de estar preparado en cuestión de finanzas, ¿estás psicológicamente preparado para el cambio? Es probable que en algún punto desees o necesites dejar tu trabajo.

Si es posible, establece una fecha clara de retiro. La incertidumbre acerca de cuándo te retirarás produce ansiedad. Otra opción es elegir un trabajo de menor responsabilidad o realizar una transición gradual, hacia el retiro.

Muchas personas piensan que deben retirarse a los 65 años, cuando pueden obtenerse los beneficios completos de la seguridad social, pero ésta es una noción anticuada.

Preguntas que te ayudarán:

  • ¿Están en orden mis finanzas? Si te sientes seguro de que has planeado de manera efectiva y puedes manejar unos cuantos baches en el camino, entonces mantente tranquilo.
  • ¿Puedo solventar mis gastos médicos? Los gastos médicos más caros de tu vida pueden estar por venir. Una parte clave para estar listo para el retiro es tener una cobertura de salud adecuada.
  • ¿Estoy psicológicamente listo? Cambiar tu rutina después de muchos años de trabajo te afecta emocional y psicológicamente. Tener un plan para lo que quieres hacer después del retiro puede ayudarte a hacer la transición.

Nunca es tarde para aprender

Nunca es tarde para aprender

La creatividad, la diversión y los amigos pueden contribuir a la felicidad y la resiliencia durante toda la vida. Aprende a conectar con tu lado lúdico a cualquier edad.

Existen distintas maneras de ser alegre, divertirse y aprender. Muchas personas disfrutan de hablar y relajarse con amigos. Otras disfrutan de la actividad física, como el yoga o la gimnasia acuática.

Los investigadores que estudian los beneficios del juego señalan que tiene más que ver con tu actitud que con lo que estás haciendo en realidad: cosas como vivir el momento, encontrar regocijo en los detalles cotidianos o encontrar diversión en la resolución de problemas.

Comienza a aprender:

  • Sueña con las cosas que te gustaría hacer. Presta atención en tu voz interna preguntándote: ¿Cómo puedo usar mis talentos?”
  • Escribe las actividades que te ves haciendo, desde trabajar medio tiempo hasta ser voluntario o tener pasatiempos.
  • Programa tiempo para un pasatiempo. ¿Siempre quisiste aprender carpintería? ¿Te encanta la jardinería? Encuentra tiempo para hacer las cosas que disfrutas. Pero ponte como meta divertirte en el proceso y no te enfoques únicamente en el producto final.
  • Disfruta del momento presente. Practica la atención plena.

¿Estilo de vida inactivo?

¿Estilo de vida inactivo?

Un estilo de vida inactivo es un factor de riesgo importante para enfermedad cardiovascular. Un estudio encontró que la inactividad es un indicador más importante de muerte que cualquier otro factor de riesgo de enfermedad cardiovascular.

Los varones y mujeres que estaban menos en forma en el estudio fueron casi el doble de susceptibles de morir por enfermedad cardiovascular que las personas en forma. La mala condición física fue un factor de riesgo cardiovascular más importante que la presión arterial alta, el colesterol alto, la obesidad y los antecedentes familiares.

La mejor condición física también mostró contrarrestar los efectos negativos de otros factores de riesgo cardiovascular. Los fumadores que estaban moderadamente en forma con colesterol alto, por ejemplo, vivieron más que los no fumadores que estaban sanos pero que eran inactivos.

Al introducir una cantidad moderada de actividad física en la vida diaria, se puede mejorar significativamente la salud general, el bienestar y la calidad de vida. El tipo de actividad que elijas hacer depende de ti. Ten en mente: mientras más se ejercite, más se podrá beneficiar.

Muchas de las funciones corporales básicas empiezan a decaer un 2% al año después de los 30 años.

Consejos para eliminar el estrés

Consejos para eliminar el estrés

El estrés es la reacción del cuerpo a las exigencias del mundo. En pequeñas dosis, el estrés puede estimularte a actuar, impulsarte y motivarte. Pero el estrés que no se controla puede conducir a problemas de salud, como presión arterial alta, enfermedades cardíacas, obesidad y diabetes.

El estrés puede ser el resultado de eventos y situaciones que te suceden y sentimientos y pensamientos en los que piensas y que te causan malestar.

El estrés puede afectar cómo te sientes, tu forma de pensar y la manera de actuar, aunque no siempre seas consciente de ello.

Elimina el estrés:

  • Haz una lista. Escribe una lista de tareas. Prioriza lo que debes hacer y ocúpate de un asunto a la vez.
  • Cuídate. Duerme lo suficiente y sigue una dieta saludable.
  • No asumas demasiadas responsabilidades ni aceptes asistir a muchos eventos sociales.
  • Haz ejercicio con regularidad. Cualquier tipo de actividad física puede mejorar el estado de ánimo y combatir el estrés.
  • Aprende a relajarte. La meditación, los ejercicios de respiración profunda y el yoga son buenas técnicas para probar.
  • Diviértete. Pasa tiempo con personas que te hagan reír o dedícale tiempo a un pasatiempo u otra actividad que te guste.

¿Cómo cambiar conductas?

¿Cómo cambiar conductas?

Tomar la decisión de adoptar un estilo de vida más saludable no es fácil. Pero el reto real es poner las palabras en acción.

De acuerdo con los psicólogos que estudian cambios de conducta, dejar una conducta no saludable puede tomarle a cualquiera de tres a 30 intentos. Y no hay una fórmula mágica para adoptar hábitos más saludables.

Al planear con cuidado un cambio de conducta y dar pequeños pasos, aumenta tu probabilidad de éxito. Considera las siguientes estrategias:

  • Sé específico. Establece con exactitud lo que quieres hacer, cómo lo vas a hacer y cuándo quieres lograrlo.
  • Comparte. Hacerlo público puede darte el apoyo que necesitas para tener éxito.

  • Programa. Existe una mejor probabilidad de lograr una meta si estableces una fecha en el calendario.
  • Encuentra un compañero. Es más probable que asistas a una clase o a una reunión si un amigo está ahí esperándote.
  • Registrar el progreso en un diario o tabla de actividades. Las personas que escriben sus logros tienen más probabilidad de seguir avanzando hacia sus metas.
  • Recompénsate. Una noche en el cine o un masaje puede alentarte a seguir con el buen trabajo.

Ten en mente que puedes tardar cerca de tres meses en desarrollar un hábito saludable. No te des por vencido.