Memoria y edad
La siguiente información, brinda ejemplos de las diferencias entre fallas mentales comunes y declinación relacionada con enfermedad. Recuerda que los olvidos ocasionales son normales, mientras que el olvido causado por enfermedad es continuo y empeora progresivamente.
¿Qué es normal?
- Olvidos ocasionales. Olvidar una cita, un plazo o el nombre de un compañero de trabajo.
- Distraerse de vez en cuando, dejar algo en el horno demasiado tiempo o no recordar servir una parte de la comida.
- Problemas ocasionales para encontrar la palabra correcta.
- Desorientación ocasional, olvidar el día de la semana o qué necesitas de la tienda.
¿Qué no es normal?
- Olvidos frecuentes o confusión inexplicable en el lugar de trabajo o en casa, hasta el punto de afectar tus habilidades laborales.
- Problemas con el lenguaje, olvidar palabras fáciles o sustituir por palabras inadecuadas, haciendo que sean difíciles de entender las oraciones.
- Desorientación en tiempo y espacio, como perderte en tu propia calle, olvidar en dónde estás, cómo llegaste ahí o cómo ir a casa.
- Juicio deficiente o disminuido, usar una bata de baño para ir a la tienda o una chamarra de invierno en un día cálido.
- Problemas con el pensamiento abstracto, dificultad para reconocer los números u olvidar cómo realizar sumas o restas básicas.