Definición y Ejercicio
El ejercicio regular es la defensa más poderosa contra los problemas de espalda y de cuello.
El ejercicio adecuado puede ayudarle a:
- Mantener o aumentar la flexibilidad de tus músculos, tendones y ligamentos.
- Fortalecer los músculos que sostienen tu espalda.
- Aumentar la fuerza muscular en brazos, piernas y parte inferior del cuerpo, reduciendo así el riesgo de caídas y otras lesiones, y obtener la postura óptima para levantar y cargar objetos.
- Mejorar tu postura y aumentar la densidad ósea.
- Perder el exceso de peso que causa estrés en la espalda.
Entre los ejercicios que son buenos para su espalda se encuentran:
- Ejercicios de fortalecimiento abdominal y de las piernas.
- Ejercicio de bajo impacto en una bicicleta estacionaria, una caminadora o una máquina de esquí.
- Incluso después de varios incidentes de dolor en la espalda baja o en el cuello, el ejercicio adecuado puede reducir de manera significativa el riesgo de volver a sufrir ataques de dolor.
- Si tienes problemas de la espalda, o no estás en buena forma física, evita las actividades que requieran avances altos y rápidos, o demasiados giros de cintura.
- Evita las caídas y los deportes de contacto.
Tips para dormir mejor:
1.Si duermes boca abajo, coloca una almohada debajo de tu abdomen para evitar lastimar tu espalda..
2.Si duermes boca arriba, coloca almohadas debajo de tu cuello y tus rodillas.
La mejor opción es dormir de costado con las piernas ligeramente dobladas hacia tu tórax, y con una almohada entre las piernas.
Rutina diaria para la espalda.
Estos ejercicios estiran y fortalecen tu espalda y los músculos que la sostienen. El ejercicio debe ser cómodo y no debe causar dolor.
- Trata de integrar por lo menos 15 minutos de este ejercicio a tu rutina diaria.
- Realiza cada ejercicio tres o cuatro veces, e incrementa progresivamente la cantidad. Si has sufrido una lesión previa o tu condición física es mala, consulta a tu médico antes de iniciar cualquier ejercicio.