Diagnóstico

Diagnóstico

El médico podría sospechar una intolerancia a la lactosa basándose en tus síntomas y en tu respuesta a la reducción de la cantidad de alimentos lácteos en la dieta. Tu médico puede confirmar el diagnóstico mediante la realización de una o más de las siguientes pruebas:

  • Estudio de hidrógeno en aliento. Después de beber un líquido que contiene altos niveles de lactosa, el médico mide la cantidad de hidrógeno en tu aliento a intervalos regulares. Exhalar demasiado hidrógeno indica que no estás digiriendo y absorbiendo completamente la lactosa.
  • Prueba de tolerancia a la lactosa. Dos horas después de beber un líquido que contiene altos niveles de lactosa, te harán un análisis de sangre para medir la cantidad de glucosa en el torrente sanguíneo. Si el nivel de glucosa no se eleva, significa que el cuerpo no digiere ni absorbe adecuadamente la bebida con lactosa.

Tratamiento

Tratamiento

En las personas con intolerancia a la lactosa causada por una afección preexistente, el tratamiento de la afección podría restaurar la capacidad del cuerpo para digerir la lactosa, aunque ese proceso puede llevar meses. Por otras causas, puedes evitar las molestias de la intolerancia a la lactosa si sigues una dieta baja en lactosa.

Para reducir la cantidad de lactosa en tu dieta:

  • Limita el consumo de leche y otros productos lácteos
  • Incluye pequeñas porciones de productos lácteos en tus comidas habituales
  • Come y bebe helado y leche con contenido reducido de lactosa
  • Añade una enzima de lactasa líquida o en polvo a la leche para descomponer la lactosa

Autocuidados

Mediante algunos métodos de ensayo y error, podrías ser capaz de predecir la respuesta de tu cuerpo a los alimentos que contienen lactosa y calcular cuánto puedes comer o beber sin sentir molestias. Son pocas las personas que tienen una intolerancia tan grave a la lactosa que se ven obligadas a eliminar todos los productos lácteos y a tener cuidado con los alimentos o medicamentos sin lácteos que contienen lactosa.

Mantener una buena alimentación

Reducir productos lácteos no significa que no puedas obtener el calcio suficiente. El calcio se encuentra en muchos otros alimentos, tales como los siguientes:

  • Brócoli y verduras de hoja verde
  • Productos enriquecidos con calcio, como cereales y jugos
  • Salmón o sardinas enlatados
  • Sustitutos de la leche, como leche de soja y de arroz
  • Naranjas
  • Almendras, nueces de Brasil y frijoles secos

Asimismo, asegúrate de obtener suficiente vitamina D, la puedes encontrar en la leche fortificada. Los huevos, el hígado y el yogurt también contienen vitamina D, y cuando tomas sol tu cuerpo genera vitamina D.

Incluso, muchas personas adultas que consumen productos lácteos no obtienen suficiente vitamina D. Consulta con el médico sobre el consumo de esta vitamina y de suplementos de calcio para sacarte la duda.

Prevención

Prevención

La mayoría de las personas con intolerancia a la lactosa pueden disfrutar de algunos productos lácteos sin presentar síntomas.

Estas son algunas maneras de cambiar tu dieta para reducir los síntomas de la intolerancia a la lactosa:

  • Elige porciones más pequeñas de lácteos. Bebe pequeñas porciones de leche de a sorbos, hasta 4 onzas por vez. Cuanto más pequeña sea la porción, menos probabilidades habrá de que cause problemas gastrointestinales.
  • Reserva la leche para las comidas. Bebe leche junto con otros alimentos. Esto desacelera el proceso digestivo y puede reducir los síntomas de la intolerancia a la lactosa.
  • Prueba consumir varios productos lácteos diferentes. No todos los productos lácteos tienen la misma cantidad de lactosa. Por ejemplo, los quesos duros, como el queso suizo o el cheddar, tienen pequeñas cantidades de lactosa y no suelen provocar síntomas.
  • Compra productos con contenido reducido en lactosa o sin lactosa. Puedes encontrar estos productos en la mayoría de los supermercados en la sección de productos lácteos.

Síntomas

Intoxicación alimentaria

La intoxicación alimentaria, un tipo de enfermedad que se trasmite por los alimentos, es una afección que las personas contraen a partir de algo que comieron o bebieron. La causa son gérmenes u otros elementos dañinos que se encuentran en los alimentos o las bebidas.

La mayoría de las personas presenta una forma leve de la enfermedad y mejora sin recibir tratamiento. En ocasiones, la intoxicación alimentaria causa un cuadro grave de la enfermedad o complicaciones.

Síntomas

Los síntomas varían según la causa de la enfermedad. Pueden manifestarse a las pocas horas o semanas, según la causa.

Los síntomas varían según la causa de la enfermedad. Pueden manifestarse a las pocas horas o semanas, según la causa.

  • Malestar estomacal.
  • Vómitos.
  • Diarrea.
  • Diarrea y heces con sangre.
  • Dolor de estómago y calambres abdominales.
  • Fiebre.
  • Dolor de cabeza.

¿Cuándo consultar al médico?

En bebés y niños, los vómitos y la diarrea pueden provocar que los niveles de fluidos corporales disminuyan rápidamente, lo que se conoce como deshidratación. Esto puede causar enfermedades graves en los bebés.

Llama a su proveedor de atención médica si los síntomas de tu hijo incluyen vómitos, diarrea y alguno de los siguientes:

  • Cambios inusuales en el comportamiento y en la forma de pensar.
  • Sed excesiva.
  • Poca o ninguna micción.
  • Debilidad.
  • Mareos.
  • Diarrea que dura más de un día.
  • Vómitos frecuentes.
  • Sangre o pus en las heces.
  • Heces negras o alquitranadas.

Los adultos deben ver a un proveedor de atención médica o recibir atención médica de emergencia si presentan algunos de los siguientes síntomas:

  • Síntomas del sistema nervioso, como visión borrosa, debilidad muscular y hormigueo en la piel.
  • Cambios en el comportamiento o en la forma de pensar.
  • Fiebre de 103 grados Fahrenheit (39,4 grados Celsius).
  • Vómitos frecuentes.
  • Diarrea que dura más de tres días.
  • Síntomas de deshidratación, como sed excesiva, boca seca, poca cantidad o ausencia de micción, debilidad grave, mareos o aturdimiento.

Causas

Causas

Varios gérmenes u otros elementos dañinos, llamados contaminantes, pueden causar enfermedades de origen alimentario. La comida o bebida que contiene un contaminante se denomina “contaminada”. Cualquiera de los siguientes elementos puede contaminar la comida:

Otras formas de alcohol pueden provocar intoxicaciones que requieren tratamiento de emergencia. Se incluyen las siguientes:

  • Bacterias.
  • Virus.
  • Parásitos que viven en los intestinos.
  • Venenos, también llamados toxinas.
  • Bacterias que portan o producen toxinas.
  • Moho que produce toxinas.

Los alimentos pueden contaminarse en cualquier momento desde que salen de la granja o la pescadería hasta que llegan a la mesa. El problema puede comenzar durante el cultivo, la cosecha o la captura, el procesamiento, el almacenamiento, el transporte o la preparación.

Las bacterias que causan enfermedades por ingestión de alimentos también se pueden encontrar en piscinas, estanques, ríos, lagos y aguas de mar. Asimismo, las bacterias como la Escherichia coli se pueden diseminar por estar en contacto con animales que padezcan la enfermedad.

Factores de riesgo

Factores de riesgo

Cualquiera puede sufrir una intoxicación alimentaria. Algunas personas son más propensas a enfermarse o a tener enfermedades más graves o complicaciones. Entre estas personas se encuentran las siguientes:

  • Bebés y niños.
  • Mujeres embarazadas.
  • Adultos mayores.
  • Personas con el sistema inmunitario debilitado debido a otras enfermedades o tratamientos.

Diagnóstico

Diagnóstico

Un diagnóstico se basa en un examen físico y una revisión de lo que estaría causando vómitos, diarrea u otros síntomas. Las preguntas del proveedor de atención médica cubrirán los siguientes aspectos:

  • Tus síntomas.
  • Las comidas o bebidas consumidas recientemente.
  • Síntomas en las personas que hayan comido contigo.
  • Cambios recientes de los medicamentos que tomes.
  • Viajes recientes.

El proveedor de atención médica te hará un examen para descartar otras causas de enfermedad y verificar si existen signos de deshidratación.El proveedor de atención médica puede solicitar las siguientes pruebas:

  • Muestra de heces para detectar bacterias, virus, parásitos o toxinas.
  • Análisis de sangre para determinar la causa de la enfermedad, descartar otras afecciones o identificar complicaciones.

Cuando una persona o una familia tienen una intoxicación alimentaria, resulta difícil determinar qué alimento estaba contaminado. El período entre el consumo del alimento contaminado y la aparición del malestar puede ser de horas o días. Durante ese tiempo, puedes haber ingerido una o varias comidas. En tal caso, resulta difícil determinar qué comida provocó el malestar.

En un brote grande, los funcionarios de la salud pública pueden ser capaces de identificar el alimento común que compartieron todos los afectados

Prevención

Prevención

Para prevenir la intoxicación alimentaria en casa, sigue estos consejos:

  • Lávate las manos. Lávate las manos con agua y jabón durante al menos 20 segundos. Hazlo después de usar el baño, antes de comer y tanto antes como después de manipular alimentos.
  • Lava las frutas y las verduras. Enjuaga las frutas y las verduras con agua corriente antes de comerlas, pelarlas o prepararlas.
  • Lava bien los utensilios de cocina. Lava las tablas de cortar, los cuchillos y otros utensilios con agua y jabón después de que hayan tenido contacto con carnes crudas o frutas y verduras sin lavar.
  • No comas carne ni pescado crudos o poco cocidos. Usa un termómetro para carne a fin de asegurarte de que esté bien cocida. Cocina las carnes enteras y el pescado a temperaturas de por lo menos 63 °C y déjalos reposar como mínimo durante tres minutos.
  • Refrigera o congela las sobras. Coloca las sobras en recipientes cubiertos en el refrigerador apenas termines de comer. Las sobras se pueden guardar durante 3 o 4 días en el refrigerador.
  • Desecha los alimentos si tienes dudas. Si no estás seguro de si un alimento fue preparado, servido o almacenado de manera segura, deséchalo. Incluso si tiene buen aspecto y huele bien, consumirlo podría no ser seguro.
  • Limpia el refrigerador. Limpia el interior del refrigerador cada pocos meses. Prepara una solución de limpieza de 1 cucharada (15 ml) de bicarbonato de sodio y 1 cuarto de galón (0,9 l) de agua. Limpia el moho visible del refrigerador o los sellos de las puertas. Usa una solución de 1 cucharada (15 ml) de lejía en 1 cuarto de galón (0,9 l) de agua.

Tratamiento

Tratamiento

El tratamiento para la intoxicación alimentaria depende de la gravedad de los síntomas y de la causa de la enfermedad. En la mayoría de los casos, no es necesario el tratamiento con medicamentos.

El tratamiento puede comprender lo siguiente:

  • Rehidratación. Los líquidos y los electrolitos mantienen el equilibrio del líquido del cuerpo. Algunos electrolitos son los minerales, como el sodio, el potasio y el calcio. Después de tener vómitos o diarrea, es importante reponer los líquidos para evitar la deshidratación. La deshidratación intensa puede requerir una visita al hospital. Quizás deban suministrarte líquidos y electrolitos directamente por el torrente sanguíneo.
  • Antibióticos. Si la enfermedad es causada por bacterias, tal vez te receten un antibiótico. Los antibióticos generalmente se administran a las personas con enfermedades graves o con un mayor riesgo de tener complicaciones.
  • Antiparasitarios. Los medicamentos para combatir los parásitos, llamados antiparasitarios, generalmente se recetan para tratar infecciones parasitarias.
  • Probióticos. Es posible que el proveedor de atención médica te recomiende probióticos. Son tratamientos que reponen las bacterias saludables en el sistema digestivo.

Síntomas

Intoxicación por alcohol

La intoxicación por alcohol es una consecuencia grave y, a veces, mortal, del consumo de grandes cantidades de alcohol en un corto período de tiempo. Beber mucho y demasiado rápido puede afectar la respiración, la frecuencia cardíaca, la temperatura corporal y el reflejo nauseoso. En algunos casos, esto puede llevar a un estado de coma y a la muerte.

La intoxicación por alcohol también puede producirse cuando adultos o niños beben accidental o intencionalmente productos de uso doméstico que contienen alcohol.Si crees que alguien presenta una intoxicación por alcohol, busca atención médica de inmediato.

Síntomas

Los síntomas de la intoxicación alcohólica incluyen los siguientes:

  • Confusión.
  • Vómitos.
  • Convulsiones.
  • Respiración lenta, por debajo de las ocho respiraciones por minuto.
  • Respiración irregular. Esto ocurre cuando hay una interrupción de más de 10 segundos entre una respiración y otra.
  • Piel azulada, grisácea o pálida.
  • Temperatura corporal baja, también conocida como hipotermia.
  • Dificultad para permanecer consciente o despierto.

¿Cuándo consultar al médico?

No hace falta tener todos los síntomas que se indican arriba para buscar ayuda médica. Una persona con intoxicación por alcohol que se desmayó o no puede despertarse podría morir.

Te contamos lo que puedes hacer:

  • Llama de inmediato al 911 o al número local de emergencias.
  • Prepárate para facilitar información. Si sabes el tipo y la cantidad de alcohol que bebió la persona y cuándo, díselo al personal de emergencias.
  • Ayuda a quien esté vomitando. Intenta mantener sentada a la persona. Si la persona debe acostarse, gírale la cabeza hacia un lado para evitar que se atragante. Intenta mantener despierta a la persona.