Tomar un descanso también es trabajar: evita lesiones con pausas efectivas

Tomar un descanso también es trabajar: evita lesiones con pausas efectivas

En muchas jornadas laborales, especialmente en trabajos de oficina o actividades repetitivas, se suele pasar por alto la importancia del descanso. Sin embargo, descansar adecuadamente durante el día no solo mejora la productividad, sino que también es una medida clave para prevenir lesiones físicas y mentales.

Estar en una misma posición por mucho tiempo, realizar movimientos repetitivos o mantener la concentración durante horas continuas puede generar tensión acumulada en músculos y articulaciones, además de fatiga mental. Esto puede derivar en problemas como:

  • check_circleDolor de espalda, cuello y hombros
  • check_circleLesiones por esfuerzo repetitivo (como tendinitis o síndrome del túnel carpiano)
  • check_circleFatiga ocular
  • check_circleEstrés y disminución de la concentración
  • ¿Cada cuánto descansar?

    Se recomienda realizar pausas breves cada 60 a 90 minutos. No es necesario interrumpir el trabajo por largos periodos: con 5 a 10 minutos es suficiente para moverse, estirarse y desconectar la mente.

    • check_circleHaz pausas activas: estira brazos, cuello, piernas o da un pequeño paseo.
    • check_circleRelaja la vista: sigue la regla 20-20-20 (cada 20 minutos, mira algo a 20 pies de distancia durante 20 segundos)
    • check_circleCambia de postura regularmente: alterna entre estar sentado y de pie si es posible
    • check_circleRespira profundamente: unos minutos de respiración consciente pueden ayudarte a liberar tensión.
    • check_circleEvita las pantallas durante el descanso: permite que tu mente y tus ojos se desconecten.
    • Incorporar descansos conscientes a tu rutina laboral no es perder tiempo, es una inversión en tu salud. Escuchar a tu cuerpo y darte pausas puede marcar la diferencia entre una jornada llevadera y una llena de molestias.

Consejos para elegir una silla ergonómica

Consejos para elegir una silla ergonómica

Pasar muchas horas sentado frente a la computadora puede afectar tu postura, causar molestias musculares y generar fatiga si no cuentas con una silla adecuada. Por eso, elegir bien una silla ergonómica es importante para cuidar tu salud en el entorno laboral.

Aquí te compartimos algunos consejos para hacer una buena elección:

Soporte lumbar

Una buena silla debe ofrecer un respaldo que se adapte a la curvatura natural de la espalda baja. El soporte lumbar evita que adoptes posturas forzadas y ayuda a prevenir dolores en la zona lumbar.

Ajuste de altura

Debe ser posible regular la altura para que tus pies descansen completamente en el suelo y tus rodillas formen un ángulo de 90°. Esto mejora la circulación y reduce la presión en las piernas.

Profundidad y ancho del asiento

El asiento debe permitir que te apoyes completamente sin que la parte delantera presione detrás de las rodillas. Un buen ajuste favorece la comodidad y el flujo sanguíneo.

Reposabrazos regulables

Los reposabrazos deben poder ajustarse en altura para que los hombros estén relajados y los brazos formen un ángulo recto al usar el teclado o el mouse.

Movilidad y estabilidad

Una base con ruedas y giro de 360° permite mayor libertad de movimiento y evita tensiones al alcanzar objetos o girar. Asegúrate de que sea estable y tenga al menos cinco puntos de apoyo.

Materiales y ventilación

Elige un material transpirable, especialmente si pasas largas horas sentado. Un asiento acolchado pero firme brinda comodidad sin perder soporte.

Invertir en una silla ergonómica no solo mejora tu postura y bienestar diario, también puede prevenir lesiones a largo plazo.